Por: Yesenia Álvarez
Perú21, 5 de Agosto del 2022
“Ayer, quien ha perdido es el pueblo, porque tenemos un presidente que no responde a las acusaciones por corrupción”.
Todo este espectáculo del presidente yendo a declarar a la Fiscalía de la Nación y las declaraciones de su abogado me han traído a la mente la famosa película El abogado del diablo, específicamente aquella escena en que el que representa al diablo, Al Pacino, le dice al abogado interpretado por Keanu Reeves que “la vanidad es definitivamente su pecado favorito”.
De alguna forma, la ciudadanía ha permitido que esa soberbia sea cada vez más atrevida en la defensa del presidente, cuyo abogado sin ningún escrúpulo ha citado El arte de la guerra, de Sun Tzu, para reconocer que han usado la estrategia del engaño, y no ha pasado nada. Sí, en televisión nos ha dicho que desde el poder este gobierno usa el engaño para defender al presidente de investigaciones fiscales por corrupción. En ese impulso de arrogancia ha sostenido también que “la presencia del presidente en la Fiscalía podría sintetizarse en lo que algún momento el gran Julio César dijo: Veni, vidi, vici”, lo cual se traduce como “Llegué, vi, vencí”, que es una frase latina que se utiliza para dar a entender la rapidez con que se logra ganar algo. ¡Inaudito!
Están empachados de poder y vanidad, se miran a sí mismos como vencedores, pero del lado de la ciudadanía sabemos que la victoria de gobiernos autoritarios y corruptos significa la derrota de la democracia y de una sociedad libre. Ayer, quien ha perdido es el pueblo, porque tenemos un presidente que no responde a las acusaciones por corrupción.
La justicia va a demorar en castigar a Pedro Castillo y de allí viene toda esta vanidad, lo sabe, por eso dilata y engaña –en palabras de su abogado–. Quiere hacer creer que la justicia se está encargando, mientras saca el problema del terreno político ante la mirada complaciente de aquellos que pueden usar facultades constitucionales para sancionarlo políticamente sin poner más tiempo en peligro a nuestra democracia.