Por: Rafael Venegas
Gestión, 13 de mayo de 2021
El desempleo es el problema número uno de los peruanos. Esto lo reveló una encuesta a fines del año pasado, que afirmó que los principales problemas de la población son: 1. Desempleo, 2. Delincuencia, 3. Corrupción y 4. Servicios de salud.
Comparado con el 2019, el desempleo pasó del tercer puesto al primero y creció del 13% al 22%( hoy cerca al 30%).
Esto como resultado de la pésima gestión del Gobierno para controlar la pandemia, que originó la crisis económica causando el cierre de muchísimos negocios y un tremendo desempleo. En el último año se han perdido casi tres millones de puestos de trabajo y el índice de desempleo se duplicó a más del 15%.
Ante esto nos preguntamos: ¿Cuál de las dos open ciones electorales respondería mejor al problema del desempleo?
El 6 de junio no solo elegiremos presidente, sino principalmente al sistema de gobierno. ¿Escogeremos a un régimen comunista, totalitario y estatista o mantendremos el sistema democrático de libre mercado?
La primera opción nunca ha sido exitosa en ninguna parte del mundo y a pesar de sus nefastos fracasos, siguen insistiendo. La segunda si ha sido exitosa, pero está algo desgastada y requiere reformas y una gestión más firme y eficaz.
La alternativa de Cerrón y Castillo propone cambiar la Constitución para perpetuarse en el poder, expropiar/estatizar empresas privadas, cancelar los TLC y otras barbaridades que ahuyentarán la inversión. Esto generaría el cierre o reducciónde muchas empresas y el abandono de las extranjeras.
En este escenario, no solo sería imposible recuperar los puestos de trabajo perdidos, sino que se incrementaría drásticamente el desempleo. Para contrarrestar esto, ofrecerían muchos puestosde trabajo en el sector público, pero a cambio de un sometimiento denigrante. Además, causaría un enorme incremento de la burocracia y del gasto público. Este desastre ya lo vivimos antes en el gobierno comunista de Velasco, que dejó al país en la absoluta miseria.
La alternativa de Fuerza Popular representa la continuidad del sistema actual, pero introduciéndole reformas y otros mitigantes, como la unidad nacional para la gobernabilidad y la gestión, así como la implementación de un agresivo plan de inversión.
Este escenario, el empleo perdido se recuperaría rápidamente, así como también la confianza de los empresarios. Esto generaría nuevas inversiones y por en de un fuerte aumento del empleo. Históricamente está demostrado que la inversión es sinónimo de generación de empleo y que la estatización es sinónimo de burocracia y desempleo.
Entonces, la respuesta a la pregunta que nos hicimos está respondida de manera clara y contundente. La alternativa de libre mercado recuperará los puestos perdidos y generará empleo adicional, mientras que la estatista incrementará fuertemente el desempleo y la burocracia.
La empleabilidad es una gran fortaleza de la alternativa de libre mercado. Por lo tanto, es una gran razón para no votar en blanco, sino por el Perú.