Entrevista a: Oswaldo Castañeda
Perú21, 19 de Octubre del 2022
Por: Mijail Palacios Yábar
Ha tratado más de 7 mil pacientes con COVID, y con ningún deceso. Representó al Perú en el primer Congreso Mundial de COVID, en Italia. Perú21 entrevistó al doctor Oswaldo Castañeda, especialista en inmunología y reumatología.
¿Un médico se jubila? Oswaldo Castañeda, con 71 años de edad, es médico desde 1978. “Dejaré de ver pacientes cuando termine mi vida”, sentencia el especialista en inmunología y reumatología que ha tratado más de 7 mil pacientes con COVID, y con ningún deceso, que lo llevó a ser uno de los dos peruanos invitados al primer Congreso Mundial de COVID, realizado en Italia, en 2021.
Recuerda y subraya el refrán que dice el diablo sabe más por viejo que por diablo. “Y eso en medicina es importantísimo. Cuanto más viejo, puedes transmitir y ayudar más porque hay más experiencia. El médico no debería retirarse”, reitera el doctor que hasta ahora no ha sufrido COVID. Maestro de la Reumatología Panamericana y Gran Maestro Iberoamericano.
En las paredes de su consultorio tiene colgadas diversas diplomas y certificaciones, pero resalta una en especial. La que dice “Harvard”, donde siguió estudios sobre cómo enseñar. “No solo es trabajar y ver pacientes, es transmitir lo que sabes”, dice el profesor universitario, que a continuación nos dicta cátedra.
-¿Qué sostiene a un profesional de la medicina que batalla con la muerte?
Cuando uno estudia Medicina, es porque quieres ayudar. Ser médico no es solo una profesión, es una responsabilidad. Cuando lo tienes bien metido en tu conciencia y corazón, uno se dedica. Yo sigo entusiasmado en seguir aprendiendo.
-Por duro que sea, ¿la pandemia ha representado el reto esperado por todo médico?
Mi especialidad es inmunología y reumatología. La primera es muy poco extendida entre los médicos, inmunólogos hay muy pocos en el mundo entero. La inmunología es una ciencia que estudia el sistema inmune. En la universidad aprendemos los lineamientos básicos y nada más, y cuando estamos como profesionales, no conocemos ni entendemos la mayor parte de las cosas de la inmunología. Además, las enfermedades reumáticas (lupus, artritis), las más serias, son autoinmunes. Autoinmunidad significa que tu sistema inmune te ataca a ti mismo. Entonces, el conocimiento de la inmunología es muy importante. Cuando empezó la pandemia, en febrero de 2020 ya se hizo una gran difusión sobre la tormenta de citoquinas. Y el COVID es una infección en la que un virus se mete a tu cuerpo y a los pocos días el sistema inmune, en su afán de destruir al virus, se desespera y despliega toda su potencia para destruirlo, pero destruye todo lo que está a su paso. En febrero eso ya se había difundido. Los virus no son seres vivos, son partículas, pero no siendo seres vivos son más inteligentes que los humanos, porque saben que cuando entran a una célula si esta se destruye o se daña, ellos mueren. Los virus cuando entran a la célula bloquean el mecanismo de suicidio que tienen las células y bloquean el mecanismo de la célula que manda un mensaje de alerta hacia el exterior.
-Es un submundo.
Es increíble. Entonces, el virus dentro de la célula y sin dañarla usa los mecanismos que tiene la célula para reproducirse. Hasta ese momento el sistema inmune no se ha dado cuenta. Luego los virus salen de la célula para invadir otras, y ahí es cuando los mecanismos de detección del sistema inmune los detectan, y comienza a desplegar su ataque. Destruye a los virus que están circulando, pero también a las células que tienen a los virus adentro. Cuando es muy grande la cantidad de virus que tiene la persona, hace que el sistema inmune desarrolle un ataque súper agresivo, y eso es lo que lleva a la tormenta de citoquinas. El ataque del sistema inmune es lo que causa la inflamación. Entonces, el entendimiento de que el COVID es un virus que desencadena un cuadro autoinmune es el que permite tratar bien a los pacientes. Lamentablemente, en el mundo entero hubo muchos intereses escondidos y malignos y se dejó de lado lo que tenía que haberse hecho. Se debió enseñar a los médicos lo que te acabo de explicar y cómo tratar la inflamación desde que comienza. Otra cosa fatal fue el absurdo de que “no hay tratamiento”. El médico que dice “no hay tratamiento”, que cuelgue su título y se vaya. Encima, este SARS-CoV-2 es el séptimo virus de una familia de coronavirus que hace años existe. No era un virus de marte, era solo una nueva variante.
-Si ese conocimiento existía, ¿por qué no lo usamos?
Porque en el mundo entero hasta ahora no se ha difundido.
-¿Cómo explicar que el sistema inmune desarrolla sus defensas?
Cuando te infectas y sobrevives, el sistema inmune aprendió a detectar al virus y a eliminarlo. Esa es una defensa. Y cuando te ponen una vacuna, igual: el virus entra, el sistema ataca, aprende y se le queda en la memoria. Y justamente porque el sistema inmune ataca, es que te da molestias una vacuna. Las vacunas no hacen daño, lo que hace daño es la ignorancia. Pero siempre digo que a la gente que no se quiere vacunar no se le puede tildar con adjetivos, hay que explicarle.
-Estamos en la cuarta dosis de las vacunas. ¿Serán necesarias más?
Sí. El virus tiene diferentes partes. Cuantas más partículas tu sistema inmune detecte y aprenda, mayor protección. La cuarta dosis es importantísima, hay que reforzar el entrenamiento del sistema inmune.
-¿Se podría pensar que el mundo empieza a sacudirse del COVID?
En China ha habido un rebrote, en Alemania hay una nueva ola y acá seguimos con contagios, sobre todo en los que tienen dos vacunas o ninguna. Y una sola persona que se muera es una tragedia. Hay que insistir en que la gente se siga cuidando. Y hay que educar a médicos, personal de salud y a la población.
AUTOFICHA:
– “Tengo 71 años. Nací en Lima. Acabé el colegio y estudié Medicina en la Universidad Cayetano Heredia. Me especialicé en inmunología y reumatología. Uno se dedica a lo que más le interesa y en lo que más puedes ayudar; en mi caso ha sido lupus y ese tipo de enfermedades”.
– “Soy médico desde 1978, son 44 años. He tenido una trayectoria larga de cargos. En el 95 fui presidente de la Sociedad Peruana de Reumatología, luego en el 2017 he sido presidente de la Sociedad Iberoamericana de Osteología y Metabolismo Mineral”.
– “En el 96 fui presidente de la Asociación Centroamericana Caribe y Andina de Reumatología y en 2017 director de la International Federation of Musculoskeletal Research Societes. Fui profesor en Cayetano Heredia desde el año 79. Hoy enseño en la UPC y atiendo en la Clínica Anglo Americana desde 1985″.