Juan Stoessel
Perú21, 9 de febrero del 2025
“AAP ya ha advertido que como está la pista, el aeropuerto de Juliaca resiste máximo hasta abril, luego tendría que cerrar por seguridad. Esto equivaldría a mutilar el circuito turístico sur”.
A menos que el Estado actúe urgentemente, en apenas tres meses el aeropuerto de Juliaca podría cerrar, dejando Puno casi en el aislamiento. En paralelo, la congestión en el aeropuerto de Arequipa se agravaría al punto de afectar severamente la fluidez de sus operaciones. De ocurrir esto, las consecuencias para el turismo serían nefastas.
El origen del problema se remonta a 2011, cuando se firmó con AAP (Aeropuertos Andinos del Perú) la concesión de los aeropuertos de Arequipa, Ayacucho, Juliaca, Puerto Maldonado y Tacna. La empresa consultora que hizo el estudio sustentatorio proyectó una demanda de pasajeros que resultó en promedio 51% debajo del flujo real. Al sostener durante años un tráfico mucho más intenso, la infraestructura fue duramente sobreexigida.
En Juliaca, la pista de aterrizaje es prácticamente inutilizable y debe renovarse completamente. En Arequipa, la terminal necesita ampliarse sí o sí, porque el aeropuerto está desbordado de vuelos. Sin embargo, el esquema de cofinanciamiento del contrato inicial se diseñó para inversiones pequeñas, no para trabajos de gran envergadura. Manejar un incremento de 1,200% sobre el gasto anual calculado es imposible para cualquier empresa. Toca alinear las condiciones del contrato a las necesidades actuales, mediante una adenda que viabilice la ejecución de estas obras. Acá no hay gato encerrado, es claro como el agua.
AAP ya ha advertido que como está la pista, el aeropuerto de Juliaca resiste máximo hasta abril, luego tendría que cerrar por seguridad. Esto equivaldría a mutilar el circuito turístico sur, quitando Puno y el Titicaca, atractivos potentísimos. Perjudicando una región cuyo turismo sigue 70% debajo de prepandemia. Y justo en un momento donde Juliaca puede capitalizar la pérdida de competitividad de Bolivia.
Pero, ¿acaso el MTC no podría hacerse cargo y reabrir el aeropuerto? Esa película ya la vimos. En Jaén el aeropuerto lleva cerrado dos años y ni siquiera han podido aprobar el presupuesto para renovar la pista. El daño al turismo en Amazonas es indescriptible. Si Juliaca deja de operar, transcurrirán mínimo tres años hasta que el Estado elefantiásico logre habilitarlo.
Es imperativo que las autoridades estatales, PCM, MTC, MEF actúen con verdadero sentido de urgencia. Basta de andar con pies de plomo, enredándolo todo en burocracia. Quedan tres meses para solucionar los problemas contractuales. Estos dos aeropuertos son estratégicos para la macrorregión sur. Ponerlos en jaque sería no un autogol del Estado, sino una autogoleada.