Por: Juan Fernando Correa
Perú21, 16 de setiembre del 2023
“Desde el sector privado debemos actuar para volver a poner nuestro país a competir por el desarrollo. Salir del fango no será fácil, pero no podemos quedarnos sin hacer nada”.
Todos los días vemos titulares y escuchamos noticias muy decepcionantes. Vemos corrupción, hambre, pobreza, violencia, asesinatos, violaciones, extorsiones y mucho más. Y además, la economía está parada, por falta de inversión privada ante la incertidumbre política en la que vivimos.
Si estuviéramos compitiendo en el Dakar, nuestro auto estaría hundido en el fango. El fango en el que estamos hundidos es producto de la indolencia del Estado, la corrupción, regulaciones absurdas y los cantos de sirenas emitidos por los enemigos de la economía de mercado que confunden a las personas.
El valor en una sociedad es creado por el sector privado, no por el Estado. La empresa privada, en una economía abierta y competitiva, es creadora de valor para la sociedad. Genera oferta de productos y servicios que son empujados a tener calidad y buenos precios por el ambiente competitivo. Cuánto más oferta haya en cada rubro mejor será la calidad y el precio. Además, la empresa ofrece empleo formal y paga impuestos.
Desde el sector privado debemos actuar para volver a poner nuestro país a competir por el desarrollo. Salir del fango no será fácil, pero no podemos quedarnos sin hacer nada. Por eso, este año en CADE vamos a llevar propuestas concretas a las que nos subamos las empresas y empresarios.
Una de ellas es impulsar proyectos de Obras por Impuestos. Este mecanismo es una forma muy potente de hacer que nuestros impuestos beneficien de manera directa, limpia y eficaz a los ciudadanos y que no se pierdan en la burocracia y la corrupción. Podríamos invertir hasta 25,000 millones de soles. Para el país sería como ponerle piedras y palos abajo de la llanta atollada para salir del fango.