Por: Jorge Yzusqui
Perú21, 12 de marzo de 2021
Se publicó el reglamento que establece los lineamientos para la apertura de los centros educativos. La norma, necesaria para el retorno seguro a aulas, deja varias dudas sobre su viabilidad y la posibilidad real de abrir las escuelas.
La regulación de aforo y distanciamiento plantea que solo se puedan tener grupos muy reducidos de estudiantes por aula, lo que implicará contar con un mayor número de docentes por grado y armar turnos mañana y tarde e incluso los sábados.
Asimismo, la disposición sobre el consenso al que se debe llegar con las familias sobre la modalidad a seguir, sumada a la posibilidad de que una familia elija una modalidad distinta, hace más difícil un posible retorno a las aulas. Ello plantea el desafío de la convivencia de dos modalidades distintas, lo que implica varias complejidades: necesidad de contar con más docentes, diseño de nuevos contenidos adaptados a cada modalidad, entre otras.
Existen diversas opiniones sobre el tema: mientras muchas familias, ante la imposibilidad de seguir las clases a distancia, demandan el retorno a aulas, existe otro grupo que se opone, debido al riesgo sanitario. Además, esta decisión también compete a las escuelas que deberán examinar su infraestructura, cantidad de docentes y demás capacidades. En ese contexto, la alianza con las familias debe fortalecerse para alcanzar los aprendizajes.
Desde siempre, hemos considerado que es importante la planificación oportuna para el retorno a las aulas, sin poner en riesgo la salud y seguridad de la comunidad educativa. Esperamos además que estas disposiciones sean aplicables a todo el sistema educativo y que no se repita lo ocurrido con las condiciones básicas de calidad, aplicables a escuelas privadas y no a las públicas, que son la mayoría de las escuelas del país.