Por: Jorge Yzusqui
Perú21, 8 de noviembre de 2019
A diferencia de otras industrias donde el rol de la tecnología y las tendencias mundiales son conocidas, en la educación no está claro cómo las nuevas tecnologías impactarán en los procesos de enseñanza-aprendizaje. Lo que sí es un consenso es que estamos a inicios de una revolución en la educación por la implementación de tecnologías como la inteligencia artificial, la realidad virtual y el machine learning. Lo que también es un consenso es que la inteligencia artificial ayudará a personalizar la educación. Ello es relevante porque tenemos varios ritmos y formas de aprender.
Este año, en una visita que hicimos a la India, vimos cómo las empresas educativas recolectan grandes cantidades de datos cuando se da el aprendizaje y elaboran varias formas en las que un alumno puede aprender un concepto. Para algunas personas que son más visuales es más simple aprender en base a gráficos, para otras, en forma numérica y hay quienes prefieren de forma descriptiva. Sin embargo, en la educación tradicional a todos se les enseña por igual, con lo que se obtienen varios niveles de resultados. Esto produce la impresión de que algunos son más inteligentes o que aprenden más, pero no necesariamente es así. Cada uno tiene una forma de aprender y los sistemas educativos deben considerar estas diferencias. Y es aquí donde las nuevas tecnologías podrían permitir la personalización de la educación. Así como en la India hacen esfuerzos para desarrollar sistemas que permitan a los alumnos elegir la mejor manera de aprender una materia, en concordancia con sus propias capacidades, en China también se hacen esfuerzos por personalizar la educación con base en la tecnología. Esto es solo el comienzo de una verdadera revolución educativa.