Por: Federico Salazar
El Comercio, 25 de abril de 2021
El candidato de Perú Libre deslindó con el líder y fundador del partido por el que postula, Vladimir Cerrón. “Más allá de lo que diga o deje de decir Cerrón, el que voy a gobernar soy yo, Pedro Castillo”. Lo ha dicho en una entrevista (Exitosa, 22.4.21).
La respuesta no solo es insuficiente, sino tramposa. De ser elegido, Castillo no va a gobernar escindido de Cerrón y del partido por el que está postulando.
El programa de gobierno fue presentado ante el Jurado Nacional de Elecciones. Es el programa por el que, teóricamente, están votando los electores de Pedro Castillo.
Ahí el partido se define como marxista, leninista y mariateguista. Cerrón diferencia su “misión” de la del gobierno: “uno hace obras, el otro construye el espíritu popular”.
La idea del cambio de Constitución permite descifrar esta retórica. El partido, en su programa, plantea la necesidad de una asamblea constituyente para plasmar “el nuevo régimen económico del Estado”.
Pedro Castillo, el candidato, ofrece lo que exige el partido: una asamblea constituyente. Castillo ha hablado de hacer un referéndum para que “el pueblo decida”.
El profesor, sin embargo, ya sabe cuál es la decisión del pueblo. “Lo que tenemos que hacer es refundar la patria en una nueva constitución porque así lo exige el pueblo”, ha sentenciado (Exitosa).
Aunque no es facultad de un presidente convocar a un referéndum, Castillo cree que puede hacerlo. Sigue en esto la receta del partido.
Zaira Arias, congresista electa por Perú Libre, sostuvo que, una vez instalada la asamblea constituyente, se cerraba el Congreso (RPP, 17.4.21). Castillo ha desautorizado esas declaraciones de una manera muy peculiar. “Quedan desautorizadas las (terceras) voces para decir lo que no es conveniente”.
Hay una pretensión de no revelar cosas inconvenientes, no de dejar las ideas del partido. Otro ejemplo es el de las ideas económicas.
“Lo que tenemos que hacer es nacionalizar los recursos estratégicos”, ha repetido, con insistencia, Castillo. El programa de Cerrón prescribe: “el Estado debe proceder a la nacionalización (…) de los sectores mineros, gasíferos, petroleros, hidroenergéticos, comunicaciones, entre otros.”
“En algunos casos solamente debe recurrirse a la nacionalización y no la estatización…”, recomienda el partido. A esto se refiere el candidato Castillo, al pie de la letra.
La nacionalización es una intervención estatal en los contratos y las gestiones. Según Castillo, él se sentará a conversar con las empresas. Afirma estar seguro de que se pondrán de acuerdo.
No es necesario, dice, ir más allá. Si una empresa no se pone de acuerdo en cambiar los términos de su contrato, se irá más allá. ¿Qué es “ir más allá”? Pasar de la nacionalización a la estatización.
Este es el esquema de la extorsión. Te pongo una pistola en la sien. Estoy seguro de que te pondrás de acuerdo conmigo. Y, si no, iremos más allá.
El programa de Perú Libre llevaría a un desastre económico y social. El estado “socialista” que quiere implantar lleva a un estado antidemocrático y a una sociedad pobre.
El candidato Pedro Castillo quiere llegar al gobierno para cumplir el programa de Vladimir Cerrón. Sus deslindes se refieren a lo que es conveniente o no decir en este momento. No deslinda con la receta, “el programa del partido”.