Entrevista a Elmer Cuba
El Comercio, 27 de noviembre del 2023
Por: María Rosa Villalobos
Cuba comentó sobre la propuesta para impulsar la formalidad laboral, presentada en CADE Ejecutivos 2023 y dio alcances sobre el panorama económico en el corto plazo.
Durante CADE Ejecutivos 2023, Elmer Cuba, socio de Macroconsult, presentó una propuesta, realizada por encargo de la Cámara de Comercio de Lima, para impulsar la formalización laboral. Dicha iniciativa, que plantea cambios en el ámbito tributario y laboral, desagrega la informalidad y la define correctamente, explica Cuba.
—¿Cuál es la diferencia entre los informales y los independientes?
Uno a veces de manera coloquial usa la palabra “informal” y es útil para llamar la atención de un problema, pero no es útil para enfrentarlo. Hay que identificarlo bien. Es como tener fiebre, pero puede ser por mil razones. La informalidad es un concepto económico y legal porque se refiere a una norma en contra de la realidad. Por ejemplo, hay minería informal, pesca informal, construcción informal, hay está médicos informales que no son médicos. Es cualquier actividad económica fuera de una regulación. En el caso tributario sería evasión tributaria. En el caso de una farmacia que opera sin licencia, es informal, es ilegal. Es una forma ‘soft’ de decirlo para distinguirlo en un delito como el narcotráfico.
Un eufemismo, pero es útil para el análisis. Hay que distinguir de algo realmente delictivo como el narcotráfico, de un señor que vende algo sin factura. Ambos son delitos, pero son tantos [los segundos], que los buenos seríamos minoría. Por eso, es importante ponerle el apellido. Si queremos referirnos solamente a informalidad laboral, tenemos que ir a la ley laboral. No hablemos de la informalidad de la empresa, que puede ser informal en el sentido de que puede operar sin licencia municipal o sin RUC.
La ley laboral existe para regular la relación entre el empleador y el empleado, para que se regule esa relación económica. ¿Qué dice la ley? Se le llama “primacía de la realidad”. Cuando uno pasa a un trabajo se verifican tres cosas: (i) ¿Tienes un jefe?, sí; (ii) ¿tienes un sueldo con base permanente?, sí; y (iii) ¿recibes órdenes?, sí. Entonces tú eres empleado dependiente automáticamente. ¿Cuál es la ley? Planilla, aportes para pensión, EsSalud, vacaciones, CTS. Es un paquete para-salarial aparte del salario. Todo trabajador que no cumple esa ley es informal laboral, pero queremos atacar eso.
Según la OIT, según el INEI, en la cifra de 70% [de informalidad] también están los independientes. El INE define al informal como un independiente sin RUC. Entonces, si soy arquitecto con RUC, para el INEI no soy informal, pero si trabajo cuidando una casa, soy informal. Eso es útil para llamar la atención de un número grande, pero no es útil hacer política pública. El no tener RUC me hace evasor tributario. Si me gano la vida limpiando autos y no tengo RUC –y no lo voy a tener–, pero si lo tuviese, sería formal. Estoy yendo a lo absurdo para explicar la idea.
—Entonces, la cifra de informalidad que bordea el 76% pone a todos en el mismo saco, tanto a un gasfitero o un carpintero, como a una persona que brinda servicios a una empresa chica que puede estar en la formalidad, pero que por temas de tributación, no se le permite entrar a planilla.
Claro. Voy a ejemplificar con una exageración. Hacemos una campaña para dar RUC a todo el mundo. Si tú sacas RUC, te doy S/50, por ejemplo. Automáticamente tendrías millones de personas independientes formales, porque según el INEI –y no estoy exagerando–, el informal es el independiente sin RUC.
El INEI podría diferenciar y decir que del 76% –o lo que fuese–, un equis por ciento del total de la PEA son independientes sin RUC, y los demás, informales laborales. Si yo fuese demagogo, hago sacar a todo el mundo RUC, por lo que automáticamente el dependiente con RUC pasa a ser formal, pero no cambia su realidad intrínseca.
—La solución es distinta para ambos sectores. La propuesta que que se expuso en CADE Ejecutvos por encargo de la CCL, se enfoca en la informalidad laboral, al que bordea la formalidad pero no logra engancharse.
Se dirige al informal laboral, correctamente definido. El informal laboral es el empleo dependiente, ese es el que viola la ley laboral. El otro no la viola porque es un vendedor…
—Sobrevive.
Claro.
—La propuesta incorpora la gradualidad. ¿En qué medida la incorpora? ¿De qué se trata la arista tributaria?
La gente puede preguntarse por qué metemos el tema tributario en informalidad laboral. El grueso de informales laborales trabaja en empresas informales. No hay manera de que tú seas formal laboral si tu empresa no es formal. Un puesto de lavadores de camiones en la carretera central, por ejemplo, con 10 operarios. Es imposible que ese operario sea formal si la misma compañía no existe. Es por eso que lo tributario es importante, porque es un combo. Primero, que la empresa se formaliza como tal y luego, que tenga trabajadores formales. En el mundo, la manera de cobrar impuestos correctamente es sobre la utilidad. En el Perú, con la Ley General del Impuesto a la Renta, desde Yanacocha hasta Alicorp, todos pagan 29,5% de sus utilidades. Eso es lo normal, pero para ese segmento pequeño no es así. Ellos no pagan por utilidades.
—Pagan por ventas.
[Asiente]. Pagan por un porcentaje de sus ventas. Por ejemplo, en el caso del RER es 1,5% de las ventas netas. No importa cuánto tengas de utilidad, cuánto más o cuánto menos. Entonces, en el en el fondo, estoy pagando menos Impuesto de Renta (IR) que otros. Y, como no es sobre la base de utilidad sino de las ventas, no importa tener trabajadores formales o informales porque no los puedes descontar. En una empresa formal se descuentan como parte del costo. En cambio, en la Mype no los descuentas, por eso no importa que estén en planilla, no es útil. Eso es para el RER, que son casi más de medio millón de empresas. Para el caso del RUS es peor. Son 1.400,000 RUS […] Por ejemplo, las personas que atienden en las bodegas nunca van a ser formales. La propuesta busca tirar al tacho esos regímenes malos, absurdos, mal diseñados, y que además producen evasión y producen informalidad, para pasarlos a renta. Si ganan poco, pagan poco, pues no pagarían 29,5% (de IR) de saque. Un tramo importante pagaría cero, como las personas naturales […] En Perú es así ahorita. Una persona, si gana más de S/2.500 mensuales, recién paga impuestos. Si tú ganas S/2.000 mensuales, pagas cero. Haz lo mismo con una Mype, no la trates diferente. Esa ley podría ser general para todo el Perú. Una empresa grande, como Antamina, pasa el umbral del 30% en dos horas.
—Esta propuesta también tiene una pata laboral.
Para el caso de los trabajadores, el tema analítico debería ser la productividad del trabajador, o lo que es lo mismo, su salario. Lo pasa con las empresas, pues todas son distintas, pasa con las personas. No somos todos iguales. ¿Cómo es posible que alguien que gana S/1.200 tenga las mismas cargas que quien gana S/20.000? El que gana S/20.000 sí puede pagar IR, puede aportar 9% por salud y 10% más de pensiones, tener 30 días de vacaciones y tener dos gratificaciones al año porque su productividad es alta.
En cambio, alguien cuya productividad es baja –lamentablemente la gran mayoría de peruanos–, si le quitas 10% para su salud, 10% para su pensión…le haces la vida imposible. Le estás diseñando un sistema para que se vaya.Ese es un informal porque él ha decidido ser así. El Estado te ha inducido a que hagas eso. ¿Y qué ganas con eso? El trabajador tiene más ‘cash’ y el empleador, que también es pobre, también se ahorra ponerte en planilla. Entonces, la idea es ser gradual. Por ejemplo, si yo soy informal y ya tengo el SIS, cuando me vuelvo formal, no quiero perderlo porque no quiero que me descuentes 9%. Es mucho. Saltar a EsSalud es perder plata y empeorar. Entonces, para un primer tramo de ingresos bajos, mantengo mi SIS.
—Y si logras aumentar el salario, haces el cambio.
Podrías pagar 6% de aporte a EsSalud y no perder el SIS. Incluso podrías ir al SIS, y que Essalud le pague un cheque [si la persona se atiende al SIS]. Ya a partir de las 7 UIT recibes un tratamiento normal, digamos. Esto, porque el Estado peruano ha reconocido que a partir de las 7 UIT, ya puedes pagar impuestos.
—Es la regla actual para persona natural.
Claro, pero para impuestos. Esa regla que se ha inventado para impuestos no se aplica para pensiones, ni para Essalud. Es absurdo. Si el Estado peruano considera que yo ya puedo pagar impuestos, ahí ya cobra el 9% para EsSalud.
—La misma lógica para pensiones.
Para las pensiones es lo mismo. El Estado te está obligando a ahorrar 10% de tu sueldo. Para las personas de ingresos medianos –para las personas de ingresos altos no es un problema porque incluso puedes ahorrar otros 10%–. Pero alguien que gana poco, no pensaba ahorrar nunca más de 10%, sobrevive no más. Entonces, viene un tercero, el Estado, que le quita 10%, lo obliga, y esa persona no quiere eso porque gana poco. Por eso, hay que graduarlo. Hay un primer tramo de 4% y luego 6%, y luego 10%. No podemos tratar a una sociedad tan heterogénea como si fuese un agente único universal.
—El Ejecutivo pidió facultades para la parte tributaria y no se las dieron. ¿A través de la Cámara de Comercio de Lima se han tenido reuniones con el Ministerio de Trabajo?
En el 2019 fuimos, junto con la CCL, al Ministerio de Economía. Algunos congresistas importantes de ese período fueron a la Cámara, y personalmente fui a hablar con premier de entonces, Salvador del Solar, porque me llamó […] Después vino la parte política, pero el tema ha estado vivo ahí todo este tiempo y varios ministros de Economía han solicitado el estudio. Las ideas están ahí, y las hemos presentado en CADE Ejecutivos [hace unos días].
—Durante el evento, conocimos el avance de PBI de setiembre, 1,29% de retroceso. Es el tercer trimestre continuo en negativo. ¿Qué se puede esperar para octubre, noviembre y diciembre? ¿Podríamos ver alguno de esos meses en positivo?
No, creo que los números negativos nos van a acompañar hasta fin de año. En el mejor de los casos, podría ser cero en diciembre.
—¿Lo que nos daría un resultado anual de cero o menos?
Menos. Si diciembre es cero, estamos ya en -0,5% en el año. Hace seis meses re-estimamos todo a -0,2% [en Macroconsult], pero las cifras han seguido viniendo peor de lo que pensábamos. Seguramente vamos a re-calcular pronto a -0,5%.
—Según el MEF, durante el primer trimestre del 2024 veríamos el inicio de la recuperación. El segundo trimestre sería más retador por las consecuencias de El Niño.¿Creen que haya espacio para un re-ajuste de sus proyecciones de crecimiento para el próximo año?
Es posible que en el verano los números ya dejen de ser rojos, es altamente probable si es que no hay una cosa espectacular con las lluvias en el norte, lluvias destructivas. Si no ocurriera ese evento, la economía debería salir, pero muy lentamente, casi como reptando, con rebote. Eso va a ocurrir. Lo que pasa es que el Gobierno podría aprovechar ese rebote para que sea mucho más. Sin hacer mucho vamos a rebotar 2%. No es un crecimiento en el sentido técnico, porque el potencial está muy arriba, y el país está abajo. Puedes tú rebotar 4%- 5% si el gobierno es exitoso y logra cambiar las expectativas, la parte política se arregla, se hacen reformas políticas, si Boluarte es más popular, etcétera. Con todo eso, rebotas al 5% sin problema. No creo que eso vaya a pasar, pero 2% es un fracaso. El 2% quiere decir que las expectativas siguen mal, todo sigue mal, pero rebota. El rebote está casi garantizado.
—El tema está en cuánto más de 2% podemos crecer.
Claro, porque los factores que nos han llevado al -0,5% este año no son repetibles. Para comenzar, este año la inflación promedio va a estar por encima de 5%, y el próximo año el promedio sería de 2,5%. Eso ayuda mucho al rebote. Los turistas el próximo año van a ser muchos más, los gobiernos regionales van a estar en su segundo año de gobierno, y El Niño no va a durar 24 meses. El Niño ya está ocurriendo, es una realidad hoy día. No es que va a haber Niño, ya hay Niño, sino mira la pesca, la agricultura. Uno a veces tiene un un sesgo cognitivo. Uno dice “Niño” y se imagina lluvias y y gente con lodo en Piura, pero puede no llover y hay Niño. El daño está hecho sin dañar la infraestructura, se daña solamente el flujo de producto. Eso no se espera el próximo año. Nunca ha habido dos años sin pesca, por ejemplo. Ese es un factor. El segundo factor es la inflación. El tercer factor es la caída fuerte de ña construcción. Este año está cayendo porque el año pasado fue el récord histórico. Nunca en Perú se había construido tanto como en el 2022. ¿Por qué? Porque tenía un fondeo que es irrepetible, por el retiro de AFP. Más bien, el próximo año no va a caer como este año 10%, es imposible. Esos factores puramente puntuales hacen que el próximo año haya un rebote, pero sería un fracaso a rebotar 2%, un fracaso del gobierno. Tenemos que ir para arriba.
—De las 25 medidas del MEF anunciadas, ¿cuáles son las más viables en el corto plazo?
La más viable es el crédito para la microempresa que se va a ampliar de S/5.000 millones a S/15.000 millones para defender la cadena de pagos. Lo demás son planes. El Plan Unidos es solamente un plan como su nombre lo dice, y va a ser efectivo cuando se comience a ejecutar. Hay cosas que son viejas y cosas que son nuevas, pero todas son positivas, todas apuntan a reactivar. Pero, el reto está en la ejecución y ojalá que lo hagan rápido, que lo hagan bien y tengamos un rebote fuerte. Es lo que uno esperaría. Lo que pasa es que hemos exagerado con la crítica a la política. Perú tiene crisis política desde hace seis años y por eso no crecemos 6%, crecemos 2,5%-3%. Es el costo de la crisis política y el Estado malo y el Congreso malo.
—Es una realidad.
Sí claro. Se puede estimar el costo de ineficiencia en Perú en los últimos seis años. Es la razón principal por la cual no crecemos al 6% sino al 2,5%. El nuevo PBI potencial de Perú es 2,5%, es el costo. [El costo] no es cero, es una ficción pensar que es cero. El cero de este año no es repetible. La crisis política no es el cero, es el 2,5%. También lo dijo Julio Velarde, en CADE.
—Al final, Julio Velarde dijo también, a su manera, que volvamos a creer.
Sí, yo creo que vamos a volver a crecer, más que creer.
—¿Se puede?
Sí, porque los últimos cinco años han sido eso. Hemos crecido sin creer […] Sin los choques exógenos vamos a ir alrededor de 2,5%-3%, y eso es no creer. ¿Sabes qué cosa es creer? Es crecer 6%, como antes. Hace diez años, Perú creía y crecía. Teníamos mejores funcionarios públicos, mejores congresos.
—Creíamos más.
Un Perú con reformas y con credibilidad, eso es 6% al año […]. No hay que ser tan pesimistas, el cero no es repetible. Un 2.5%-3% es un fracaso como país, muy difícil para el empleo, pero hay negocio. Es decir, un país que crece a 2,5% – 3% vende cosas, ese es el riesgo, el riesgo de la complacencia. Vendes cosas, pero por otro lado, la gente está impaciente, la gente vota y la gente se molesta.