Entrevista a Eduardo Jiménez, jefe del Sistema de Información de Macroconsult
Gestión, 28 de abril del 2025
Whitney Miñan Cabeza
Para Jiménez, el déficit fiscal se reduciría un punto este año, es decir, se ubicaría en 2.6% del PBI. «Si bien estás encima de la meta, no es un resultado que tienda a preocupar»
Macroconsult hizo un ajuste a sus proyecciones macroeconómicas: se espera un incremento de 3% para este año. En conversación con Gestión, Eduardo Jiménez, jefe del Sistema de Información de Macroconsult, muestra un panorama algo optimista este año, pero con retos claros.
¿Cómo se ven los primeros cuatro meses del 2025?
Marzo -con alta probabilidad va a estar cerca del 5%. Es un primer trimestre cercano del 4% de crecimiento. Está dominando un efecto importante, una suerte de optimismo -que se ve este año- y se traduce en que muchas acciones que se pensaban hacer en el 2026, se están adelantando para el 2025.
El próximo año tienes un entorno de bastante incertidumbre y, ante ese hecho, mejor traen las acciones hacia adelante, donde tenemos una suerte de relativa calma política. Eso está dominando incluso sobre este entorno internacional.
¿Cuál es la proyección que tienen para el 2025?
Tenemos (una proyección) de 3% para el 2025. Ciertamente hay riesgos, como siempre, pero hemos revisado este número al alza, por este buen ánimo en las empresas que se está traduciendo en este adelanto de inversiones.
¿Cuáles son los factores de riesgo que empujaría a una rebaja de su proyección?
Sin duda la parte internacional (la guerra comercial). De otro lado, siempre puede haber factores internos, pero a la luz de lo que estamos viendo parece ser que lo internacional es lo que va a dominar el escenario.
Aún así, la parte política, por ejemplo, de la campaña electoral, puede comenzar a manifestarse a finales de este año, pero creo que no va a cambiar demasiado los números.
El déficit fiscal aún está lejos del “techo” de 2.2% del PBI para este año…
Del lado de los ingresos, ya salieron los datos de marzo, que duplican lo que teníamos el año pasado, y en abril, puede ser un monto mucho mayor. Con lo cual, con el efecto crecimiento de la economía y la regularización del Impuesto a la Renta, tranquilamente puedes reducir el déficit en un punto (a 2.6% del PBI). Si bien estás encima de la meta, no es un resultado que tienda a preocupar. Creo que ya no es la preocupación central.
¿Cuál es la preocupación?
La preocupación central del ministro de Economía y Finanzas (José Salardi) viene por el lado de los proyectos y de las inversiones, que es algo que está tratando de empujar, y de dar facilidades, con diversas medidas en APP, destrabes de inversiones, y las más de 400 acciones en el shock desregulatorio.
¿La Municipalidad de Lima se vuelve un riesgo dentro de sus proyecciones del déficit fiscal para el 2026?
El nivel de endeudamiento de la Municipalidad de Lima ya es tremendo. Es efectivamente un riesgo, como Petroperú, pero en la medida que el alcalde de Lima esté más preocupado por ser presidente, creo que ese riesgo se va a ir diluyendo.
Algunas medidas del shock son para el mediano plazo, pero ¿cuáles ve ejecutables este año?
Las que puedo destacar son las vinculadas al tema de Obras por Impuestos, APP, entre otras. Además, tratar de seguir sacándole la parte negativa a los trámites del Estado, me parece importante. Y una particularmente resaltante es el Régimen Tributario Emprendedor. Si se ejecutara solamente un cuarto de lo que está indicado en el shock, se estaría haciendo bastante.
¿Hay exceso de optimismo por parte del MEF de crecer 4% este año?
Si yo fuera ministro de Economía, también dijera algo parecido. Hay un sesgo de ministro y es necesario, importante, tratar de ser lo más optimista posible. Pero, seguramente (el titular del MEF) va a tener que en algún momento ir limitando ese buen ánimo porque no parece que la economía vaya a crecer 4%, o sea, se ve muy distante.
¿Qué opinión tiene sobre el cambio del MEF, que ahora respalda proyectos con exoneraciones y beneficios tributarios?
Como principio, las exoneraciones no son una buena idea. Hay que evitarlas. Sin embargo, es verdad también que en algunos casos no se pueden negar, como en Chancay.
¿Qué tanto se va a quedar, en materia fiscal, “ordenada la casa” para el próximo Gobierno?
Este año, el déficit fiscal puede cerrar en 2.6% del PBI y el próximo año no debería subir demasiado. No debería volver a 3.5% del PBI, ni nada parecido. Pero, ciertamente es un riesgo importante. Además, la inversión pública hay que apoyarla, pero hay que controlar el otro tipo de gasto, el corriente.
Hay que ser muy cuidadosos y ese reto está claramente puesto para que el Gobierno cierre adecuadamente esto. Creo que “la casa queda -dentro de todo- ordenada”, pero hay que hacer esfuerzos para que eso se cumpla.
¿El Gobierno de Dina Boluarte aún puede hacer reformas?
Veo demasiado cómodo al Congreso y al Ejecutivo. Han hecho una “simbiosis” para las cosas negativas. Esto que acaba de pasar con la CTS te grafica muy bien la situación. Ojalá el ministro José Salardi lo comente, guardo la esperanza que lo haga.
Además, no veo que se vaya a hacer reformas importantes. La propia reforma de las pensiones, quizá la más importante en esta gestión, se quiere perforar buscando nuevos retiros. El Congreso es un riesgo.