Por: Augusto Álvarez Rodrich
La República, 4 de octubre del 2023
Sus viudas políticas pretenden maquillar su penoso gobierno.
La pretensión de responsabilizar al BCR por la desaceleración de la economía es una de las ideas absurdas que lanzan en estos días las viudas políticas del gobierno de Pedro Castillo.
Kurt Burneo, su ministro de economía, criticó anteayer en este diario la política monetaria del BCR por “tirarse abajo el gasto con el aumento de la tasa de interés. La subieron sistemáticamente”, lo cual, agregó, produjo “una afectación en el consumo de inversión y sobre la actividad económica” y la “desvalorización de la economía”.
En lo que parece defensa de su gestión en el gobierno de Perú Libre, Burneo dijo: “Pareciera que la responsabilidad de la desaceleración económica la tiene solamente el MEF y no es así. El banco central tiene que ver y eso tiene que ser reconocido también por ellos”.
En la misma dirección, pero con más audacia, el expremier Aníbal Torres se lanzó al ruedo: “Dicen que Castillo fue un incapaz, bueno, pues, con Castillo la economía crecía 3%. Con los supuestos capaces que tenemos ahora, la economía está en un despeñadero”.
Torres miente, que es lo que mejor hace. El primer registro anual de crecimiento del gobierno de Castillo en 2021 fue 12% (cuatro veces su mención), pero eso no fue mérito de su cómplice golpista, sino rebote del pandémico 2020 con una caída de -12,2%. Así, cualquiera.
Y en el 2022 en que Pedro Castillo fue presidente hasta diciembre, cuando lanzó el golpe más tonto de la historia, el crecimiento fue 1,7%, casi la mitad de su 3%, pero lo evidente es que la caída de la inversión privada ya se profundizaba en un proceso de pérdida de confianza empresarial acelerada que continúa.
“En el gobierno de Pedro Castillo se robó mucho y eso lo seguimos viendo, pero lo que más nos robó Pedro Castillo fue el sentido de futuro del país. Ese quiebre de expectativas no solo motivó la salida de US$20.000 millones, sino que frenó la inversión privada. Reconstruir esa confianza va a tomar tiempo”, comentó Gianfranco Castagnola, presidente de Apoyo Consultoría.
Burneo también criticó las descoordinaciones recientes en el gabinete sobre Tía María, pero olvida lo que pasaba con sus colegas Torres, Betssy Chávez, Geiner Alvarado o Roberto Sánchez, hoy investigados por corrupción o golpismo. ¿O con ellos sí se llevaba bien?