Por: Arturo Woodman P.
Expreso, 9 de junio de 2020
El actual gobierno está utilizando dos estrategias para ganarle la batalla al Covid-19: una de ellas es la prevención y la otra, la atención a los enfermos que llegan a los Hospitales para su pronta recuperación. Indudablemente, ambas son importantes pero el gobierno estaría dando prioridad a la atención a los enfermos y su hospitalización. Esto se refleja en que las mayores decisiones, se basan en o qué sucede en los hospitales. Aun así, estos están colapsados, pues hay deficiencias de camas UCI, ventiladores, y hasta falta de oxígeno y sus envases, e inexplicablemente el Gobierno, recién estaría implementando las medidas necesarias.
Evidentemente, la atención a los enfermos graves, es importante, pero sería bueno fijarse en las estrategias que se realizan en otros países, donde la prioridad, es la prevención; es con esta que se evitan los contagios y así se evita el colapso en los hospitales.
En el País, existe una aceptable prevención a los contagios (uso de mascarillas y distanciamiento) y promoviendo la cuarentena en sus casas o en la Villa Panamericana, pero en realidad, ni en Lima ni en el resto del país, se ha implantado una atención preventiva especial, que evite las complicaciones que genera el Coronavirus.
Sin ir muy lejos, un gran ejemplo es Guayaquil. Allí, un grupo de entidades privadas ha iniciado un agresivo plan de prevención, que se basa en el uso de las pastillas de hidroxicloroquina y azitromicina. Según los informes, los resultados han sido muy satisfactorios: las muertes en Guayaquil que se iniciaron con números altos, llegando a más de 300 promedio por día, hoy están en el orden de 20 diarios y en la provincia de Manabí, han logrado cero muertes.
En Piura, una zona muy afectada, una empresa con elevado número de trabajadores ha seguido con éxito el procedimiento utilizado en Guayaquil e inclusive un grupo de empresarios, está insistiendo en ampliarlo a la Ciudad, en un esfuerzo Privado – Gobierno Regional.
En relación con la atención que necesitan los contagiados en Lima, el Sr. Presidente decidió utilizar algunos edificios de la Villa Panamericana, donde se acondicionaron alrededor de 700 camas, para atender la cuarentena de los contagiados, decisión muy oportuna y de gran utilidad. Pero también anunció que podrían convertir ese complejo habitacional en hospitales, prescindiéndose que para una buena y eficiente operatividad de estos, tienen que tener áreas amplias en cada piso, de tal forma que puedan existir y atender a 20 o 30 pacientes.
Es fácil observarlo en el Hospital Rebagliatti o en cualquier Clínica, siempre está este requerimiento, que no podrá resolverse en la Villa, por el área pequeña por Departamento y por piso. Además un Hospital necesita techos altos con cielo raso para poder instalar una serie de conductores: oxígeno, comunicación, luces, aire acondicionado, seguridad y más; los ascensores deben ser amplios, al igual que las puertas, para poder operar las camillas. En resumen, muy buena decisión usar la Villa para cuarentena, pero no para convertirla en Hospitales.