¡Vaya que por fin un gremio empresarial –la CCL– se pronunció en contra del aumento a la tasa impositiva a los dividendos! Pero sus pares Confiep, SNMPE y Comex se quedaron calladitos. Cada día me convenzo de que jamás va a haber un verdadero capitalismo aquí, dado que no existe una élite –tanto empresarial como tecnócrata– con una mentalidad realmente capitalista, sino “mercantilista” y rentista. Miopes políticamente (nunca defienden el modelo) y “pactistas” con el gobernante de turno. ¡Hernando de Soto tiene tanta razón! Tal como los rojos Francke y Campodónico, estos gremios “capitalistas” criollos también ven mal que se gane más dinero y se generen más millonarios, la base de la expansión de ese sistema. ¡Hasta mi amigo Gianfranco Castagnola resultó un “francés”, al elogiar ese aumento a los dividendos! ¡Un consultor empresarial alabando un aumento tributario dirigista! ¡Plop! ¡Hasta mi amigo Abusada! ¡Plop! ¡Y les dicen “neoliberales”! Como decía Piérola, “país de desconcertadas gentes”. Y encima nos proclaman “Rumbo al Primer Mundo”… ¡Si no saben ni jugar “Monopolio”!
Pero hay que reconocer esfuerzos válidos. Por ejemplo, el proyecto Umbral, del minero Augusto Baertl, acaba de publicar el libro de divulgación Somos libres, podemos elegir, donde el colega Mario Sifuentes explica nuestros últimos 20 años desde un punto de vista liberal. Por eso hay que comenzar: no hay que dejar que nuestra historia la escriban o la narren los rojos o caviares (la CVR fue un intento grosero de eso).
Como escribió mi favorito Orwell: “Quien controla el pasado controla el futuro. Quien controla el presente controla el pasado”. Procure que sus hijos lean ese libro.