Por: Aldo Mariátegui
Perú21, 2 de Mayo del 2023
“Si hay un sector de profesionales que son especialmente negados para entender de economía, estos son los abogados”.
Cada Día del Trabajo me acuerdo de Jorge Rendón Vásquez, el asesor del general Pedro Sala Orozco, ministro de Trabajo de la dictadura velasquista y el peor enemigo del empleo formal, pues fue Rendón quien volvió rígido y caro el despido en el Perú con el Decreto Ley 18471 del 10/11/1970 (el autor del desastre fue él, pues el opaco Sala Orozco pasaba por ser uno de los menos inteligentes de los ya poco inteligentes ministros velasquistas. Incluso cuentan que Velasco decía al final de cada reunión de gabinete: “Si entendió Pedro, entonces entendimos todos”). También me acuerdo del rojimio abogado democristiano Carlos Blancas, ese ministro de Trabajo del nefasto Alan 1 que deshizo lo poco que había flexibilizado el despido el gobierno de Morales Bermúdez con la Ley 24514 de 1986, en compañía de Luis Alberto Sánchez y Luis Negreiros. Y tampoco me puedo olvidar del TC presidido por el ‘Lechuzón’ Alva Orlandini y compuesto por los magistrados TC Delia Revoredo, Víctor García Toma, Juan Bardelli, Guillermo Rey y Magdiel González, quienes prácticamente eliminaron el despido con indemnización al posibilitar la reincorporación del despedido con su sentencia sobre el expediente 1124-2001, respecto a un caso de Telefónica. Y también el supuesto economista liberal y gurú barato Jorge González Izquierdo, ministro fujimorista que encareció el despido en los 90. Cuando se pregunten por qué se crea tan poco empleo formal en el Perú, no solo busquen razones económicas sino legales, como esta. Si hay un sector de profesionales que son especialmente negados para entender de economía, estos son los abogados. Solo los sindicalistas y los izquierdistas le superan como los peores enemigos del empleo. Ignoro por qué es tan difícil de entender que habrá mucha más creación de empleo y rotación rápida mientras sea más fácil contratar y despedir. Nada más. Por eso EE.UU. es una máquina de crear empleo y por eso casi toda Europa y Latinoamérica son tan lentas en crearlo.