La única manera de superar la impresionante alienación que Conga ha generado en el campesinado cajamarquino y que ese proyecto –junto a Galeno y Michiquillay– pueda salir adelante es implementando el modelo de Alaska en Cajamarca. Las mineras deberían comprometerse –o ya de una vez– a repartir un bono mensual a cada familia. No sé si el Estado les permitirá que ese dinero salga del canon o que se lo deduzca del I.R. como ‘gasto social’, pero ya es evidente que esta va a ser la única manera de que se logre revertir rápido tanto mito y el poder de la izquierda allí para que estos proyectos, tan necesarios para el país, salgan adelante. A ojo de buen cubero: Conga, Michiquillay y Galeno impactan en Sorochuco, La Encañada, Huasmín y Bambamarca, que albergan juntas a unos 120 mil habitantes, o sea, unos 30 mil hogares. Entre las tres minas que repartan un total de S/.1,000 al mes a cada jefe de hogar y por S/.30 millones mensuales ya se tendrá a la población a favor y a la izquierda desmontada. ¡No creo que S/.10 millones mensuales vayan a quebrar a cualquiera de estas tres minas! Es la mejor manera de que el campesinado sienta inmediatamente los beneficios de tener minería cerca. Así como billetera mata al galán, las transferencias directas de dinero acabarían con Patria Roja y Tierra y Dignidad. Como dicen los yanquis: “Money changes everything”.
PD: Veo que los tuiterillos Susan Pastor, Romina Villarreal, Mario Vásquez, Celin García, Ramón Léon y Willy Z se unieron ayer a la recua de ‘Las Mulas’ Ginno Melgar y Pablo del Valle, amén de Cynthia Sanborn, Rodrigo Quijano y Javier Torres Seoane. ¡Jua, jua! Léanme el lunes, estimados.