Carlos E. Gálvez Pinillos
Expresidente de la SNMPE
Para Lampadia
Hace unas semanas y luego del “roadshow” denominado “Consejo de Ministros descentralizado”, en los que el ejecutivo no resuelve nada, ni alivia necesidad alguna, pero con los que el gobierno hace sus mejores esfuerzos por convencer a la ciudadanía de que, “nada se puede hacer sin cambiar la Constitución”, el poder ejecutivo presentó un proyecto de ley para que, y en contra del mandato constitucional, se convocara a Referéndum para aprobar el establecimiento de una Asamblea Constituyente.
No sólo debemos insistir que menos del 8% de la ciudadanía considera prioritario un cambio de constitución, sino que, además, muchos abogados especialistas han precisado claramente que lo planteado, no sería un referéndum sino un Plebiscito, acción que no está prevista en nuestra constitución. Nuestra constitución, explícitamente establece los mecanismos a seguir para su enmienda parcial o total.
Esta gente, además de faltar al fondo y forma de nuestro marco constitucional, está violando el “Compromiso Solemne”, firmado durante el proceso electoral, mediante el cual se estableció, bajo juramento, que cualquier modificación constitucional se efectuaría siguiendo los mecanismos establecidos en ella. Además, aspiran a que sólo 40% sean representantes de organizaciones políticas inscritas, dejando entre candidatos independientes (30%), representantes de pueblos indígenas (26%) y representantes de los pueblos afroperuanos (4%), un amplio 60% de gente puesta por el gobierno para plantear e imponer cualquier cosa, como aquellas que viene empujando este gobierno, desmantelando incluso muchas de las reformas que tanto nos costaron.
Como era natural, la comisión de Constitución del Congreso ha enviado el proyecto de ley al archivo. Ese era el camino inexorable de un proyecto tan absurdo como el alcanzado al Congreso, sin embargo, el jefe de Pedro Castillo ahora ha salido con el atrevimiento de decir que “para hacer cambios en el Perú, se tiene que cambiar completamente la Constitución, lo que, si no se logra por métodos pacíficos, se tendría que hacer por métodos no pacíficos”.
Este delincuente sentenciado, al que el sistema judicial le está permitiendo actuar y hablar como si fuera un ciudadano libre, está incitando a la violencia en contra del ordenamiento jurídico y democrático. Mal por el sistema judicial en pleno por permitirlo, pero peor por la Junta Nacional de Justicia, por dejar que jueces y fiscales, medrosos o mafiosos, permitan tal comportamiento.
Tengamos claro que los ciudadanos de bien, siempre se defienden en el plano de las ideas, explican y tratan de convencer con argumentos. Es más, son generalmente personas adultas, educadas y de experiencia, quienes apelan a su sabiduría, para que los más jóvenes aprendan. Sólo el lumpen y los desadaptados sociales apelan a la violencia para imponer sus deseos e impulsos, así como a mensajes claramente populistas, que son muy atractivos para los menos favorecidos, a quienes es muy fácil empujar contra una sociedad republicana, que reconoce méritos al que logra éxitos en base a su esfuerzo, mientras trata de ayudar a quienes no lo lograron. Sin embargo, sembrar el odio y la envidia les resulta fácil, capta a muchos adeptos y polariza en extremo, fomentando el caos en la sociedad.
Definitivamente, esta gente está abusando de la posición, adoptada correctamente por las Fuerzas Armadas (FFAA) y por la Policía Nacional (PNP), debido a su condición de no deliberantes. Pero tengan mucho cuidadito de no excederse de los límites legales y pretender pasar de las palabras a los hechos.
Me hacen acordar a mi perro, quien sabe que mientras ladre tras la reja, aunque lo haga todo el día, no le pasará nada más que recibir la orden de callarse. Pero mi perro, que es un ser inteligente, sabe perfectamente que no debe de ninguna manera pasar a los hechos y atacar, pues corre el riesgo de una buena reprimenda.
Espero que tengan claro que nuestras FFAA y PNP, están atentas a su buen o mal comportamiento y que, si cometieran el atrevimiento de un “acto no pacífico” para impulsar sus ideas trasnochadas, ellas actuarán en defensa del orden legal y la constitución.
Sólo espero que Cerrón y sus adláteres estén a la altura del coeficiente intelectual de mi perro y no obliguen a intervenir a nuestras fuerzas del orden. Recuerden que las FFAA y la PNP se subordinan a la Constitución y controlarán cualquier intento de salirse del cauce constitucional. Lampadia