Rafael Venegas
Para Lampadia
¿Por qué el comunismo sigue vigente y amenazador, a pesar de haber fracasado rotundamente en todos los intentos de implantar su infame doctrina y de no tener un solo ejemplo de éxito que mostrar en más de cien años de actividad?
La razón es muy simple, se debe a la eficaz estrategia que empezaron a ejecutar apenas se recuperaron de la tremenda derrota evidenciada por la caída del muro de Berlín y la de todos los regímenes comunistas de Europa Oriental hace tres décadas.
Además, lo han podido hacer fácilmente a vista y paciencia de todos, ya que han tenido el campo totalmente libre y sin ningún tipo de oposición. ¡Craso error!
El nuevo plan sustituye a la conquista del poder a través de la violencia y el terror por la manipulación masiva de las mentes para luego acceder al poder por la vía electoral.
Esta nueva estrategia se basa en cuatro tácticas de largo plazo que han venido implementando disciplinadamente:
- El adoctrinamiento masivo vía la toma de la educación (Ya hay más de dos generaciones adoctrinadas).
- El copamiento de las instituciones públicas para manejarlas a su favor, especialmente en los frentes de justicia y procesos electorales.
- La penetración de los medios de comunicación y las redes sociales para manipular la información.
- El uso permanente de una eficaz PROPAGANDA POLÍTICA.
En el mundo empresarial se sabe que un mal producto apoyado por una eficaz publicidad tiene mucho mayor éxito comercial que un gran producto sin una efectiva comunicación.
Igualmente, en el mundo de la política, una mala doctrina apoyada por una propaganda eficaz tiene mucho mayor éxito que una buena que no tiene un adecuado apoyo comunicacional.
En pocas palabras, no basta con tener un gran producto o una gran idea para tener éxito masivo, ya que la diferencia está en la forma como se comunica y convence al usuario, aunque se trate de algo falso. ¡ASÍ DE PODEROSA ES LA PROPAGANDA POLÍTICA!
Esta herramienta fue utilizada “exitosamente” por los movimientos políticos totalitarios, como los nazis, los fascistas y los comunistas, para manipular y someter a las masas en sus nefastos procesos.
La izquierda, conocedora de este gran poder sobre las masas, la vienen utilizando eficazmente para esconder sus fracasos y abusos represivos para poder seguir adoctrinando con sus obsoletas ideas a los jóvenes, los vulnerables y los desinformados.
Además, cuentan con el apoyo de los caviares, que cumpliendo su rol de tontos útiles, han penetrado los medios de comunicación y las redes sociales para servirles de caja de resonancia.
De esta manera no sólo se han podido mantener vigentes políticamente, sino que, con la ayuda de las parcializadas autoridades electorales, han conseguido hacerse del poder en la mayoría de los países de nuestra región.
Por supuesto que esto no sería posible de ninguna manera si existiera una férrea y valiente oposición que evidencie mediáticamente sus manipulaciones, sus mentiras, sus fracasos y las sangrientas represiones que cometieron en nombre de la “justicia social”.
A esto también se le debería sumar una campaña de difusión de los éxitos conseguidos por el sistema antagónico que practica la libertad, la propiedad privada y la economía de libre mercado y que ha generado un claro desarrollo y crecimiento económico, así como aumento del empleo, crecimiento del poder adquisitivo y reducción de la pobreza.
Sin embargo, esta oposición no existe debido a la total indiferencia y falta de participación de la sociedad civil.
¡NUESTRA DEBILIDAD ES SU FORTALEZA!
Por eso los comunistas, siguiendo al pie de la letra los principios de propaganda política de Goebbels, han recuperado el protagonismo político instituyendo a la mentira como base de su comunicación que es muy simple y repetitiva, pero muy eficaz. “Una mentira repetida mil veces se transforma en verdad” (Joseph Goebbels).
También han generado un tremendo odio visceral al “enemigo común”, que en este caso es el Fujimorismo. Esta táctica les ha sido sumamente exitosa y les ha servido para conseguir el triunfo en las tres últimas elecciones convirtiendo al “PARTIDO ANTI-FUJIMORISTA” en un ganador triple corona, 2011, 2016 y 2021.
Por todo esto, nos debemos de preguntar: ¿Hasta cuándo vamos a seguir indiferentes y pasivos, haciendo el papel de tontos y desperdiciando las grandes oportunidades de desarrollo que nos brinda nuestro país?
¿Por qué no somos capaces de unirnos para diseñar, financiar y ejecutar una campaña de comunicación efectiva, que contrarreste y anule la propaganda política manipuladora y mentirosa de los fracasados comunistas y sus satélites?
No debemos permitir que sigan utilizando nuestra debilidad como su fortaleza. Tenemos que enfrentarlos y derrotarlos con las mismas armas.
¿Qué estamos esperando? Lampadia