Mediante el otorgamiento de facultades legislativas
Jaime de Althaus
Para Lampadia
Ha sido una buena noticia que el Congreso aprobara otorgar facultades legislativas al Ejecutivo para facilitar el tránsito de los funcionarios públicos del Ejecutivo al régimen del servicio civil. Es decir, para implantar la meritocracia en el Estado.
Se trata de una reforma de mucho calado.
Como sabemos, el congreso anterior aprobó una ley que acabó con el régimen CAS y ordenó el nombramiento a plazo indefinido de los más de 300 mil empleados sujetos a esa modalidad. En lugar de disponer su ingreso al régimen del servicio civil, simplemente los nombró sin evaluaciones y sin carrera. La receta perfecta para el ocio y la indisciplina burocrática.
Parece que Servir ha encontrado una solución, que plasmará en un decreto legislativo. La estrategia, según nos explica su jefa, Ana Pari, sería la siguiente:
Comenzar con las 174 entidades públicas del Poder Ejecutivo, que tendrán 180 días, desde que se publique el decreto legislativo, para obligatoriamente producir los documentos de gestión de tránsito al servicio civil.
Esos documentos son dos: el cuadro de puestos de la entidad (qué tipo de personal necesita), y el manual de perfil de puestos (que características tiene el puesto, qué grado académico, cuanta experiencia, etc.).
Cumplida esa etapa, se pasa a los concursos para llenar los puestos. Postularía primero el personal de la propia entidad. Algo importante es que el paso al régimen de servicio civil de los empleados que ganen el concurso tendrá un impacto presupuestal porque se les pagará, de acuerdo con el perfil y la escala en la que estén, 14 sueldos y una CTS. Los CAS actuales, o ex CAS, solo reciben 12 sueldos y un aguinaldo. Entonces el decreto legislativo debe estar publicado a más tardar a mediados de noviembre para poder incorporar el mayor gasto implicado en el presupuesto del próximo año.
El universo de personas del Ejecutivo que podría pasar al servicio civil es de 177 mil. A nivel nacional, considerando gobiernos regionales y locales, son 500 mil. Recordemos que allí están sobre todo los administrativos, no los que ya tienen una carrera, como los maestros, los policías o los médicos. El plan prevé que 20 mil ingresen al régimen del servicio civil en los primeros 18 meses. Sería un avance importante considerando que en los últimos 10 años solo han hecho el tránsito al servicio civil 2 mil personas en 15 entidades. La idea es pasar 70 mil al nuevo régimen en 5 años.
El tránsito de las personas al servicio civil es voluntario. Puede haber trabajadores CAS ahora nombrados que no quieran concursar, pero se pierden la posibilidad de ascender en la carrera y más mayores remuneraciones por escala y por beneficios. O sea que hay incentivos para hacer el tránsito.
Es muy importante que haya apoyo político y presupuestal para esta reforma, que es clave para pasar a un Estado meritocrático. Recordemos que en el servicio civil se asciende luego de evaluaciones de desempeño, y a la segunda evaluación que se desaprueba, el funcionario es retirado del servicio civil. Esto es fundamental para asegurar servicios públicos eficiente y al servicio de los ciudadanos, no de sí mismos. Lampadia