Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Lima, 30 de abril de 2021
Para Lampadia
“No sabe / No opina” es una expresión muy común en estos días en nuestro país, y está relacionada a las súper manoseadas – y arregladas – encuestas de intención de voto para las elecciones presidenciales del 6 de junio. “No sabe / No opina” se refiere a aquellos electores que – hasta este momento – no han decidido aún por quién votar. Están en duda, o – mejor dicho – están en la luna.
Sin embargo, lo que llama la atención en este caso es que es el propio candidato Castillo el que “No sabe / No opina”. Efectivamente, nunca habíamos tenido a un candidato tan fuera de foco frente a conceptos elementales de economía y política, ni tan evasivo frente a las típicas preguntas del periodismo.
– ¿Hay dictadura en Venezuela? – le preguntó hace poco la periodista Juliana Oxenford. Y en vez de contestar con un sí o un no sencillo y directo, empezó con las evasivas. – Más allá de Venezuela, yo no voy a vivir en Venezuela, yo no voy a juzgar a Venezuela, ocupémonos del hambre del pueblo, yo no voy a solucionar los problemas de Venezuela – contestó el candidato.
- Por otro lado, no le gusta reconocerse comunista, a pesar de que Perú Libre – su partido político – consigna en su ideario ser marxista, leninista, y todo lo demás.
- Dice que va a estatizar la economía, pero no le gusta que le digan estatista.
- Dice que va a respetar la constitución, pero quiere tirársela abajo.
- Incluso quiere desaparecer el Tribunal Constitucional, la Defensoría del Pueblo, el Congreso de la República, la SUNEDU y – lo escuché hace poco – hasta las Cajas Municipales de Ahorro y Crédito.
- Dice que Saga Falabella y Metro son empresas monopólicas porque… escuchen bien – aglutina su economía para sacar un beneficio personal, un beneficio empresarial, sin importarle el Estado, sin importarle el pueblo –. (Sic) ¡El tipo no tiene idea de lo que es un monopolio! Lo que tiene es puro odio hacia todo lo que signifique empresa privada.
Pero nada más vago y sinsentido que la entrevista que brindó al Canal RTV de Colombia. Ante la pregunta de la entrevistadora acerca de cómo pensaba inmunizar a la población frente al COVID, el candidato respondió – lo que debería hacer el gobierno en este plan de reactivar la economía, no les ha dado a las personas que han pechado a esta pandemia, por ejemplo, el sector agricultura. Yo creo que el gobierno debe sentar una posición, nuestro plan va por ahí –. (Sic) Aunque parezca mentira, esa fue su respuesta a la periodista colombiana. ¡Una vergüenza!
No obstante, el candidato Castillo sí sabe promover vandalismos y alteraciones del orden público. A los hechos me remito. En el año 2017 – cuando yo era Gobernador Regional de Ica – Castillo pretendió imponernos una huelga magisterial que había impuesto a nivel nacional. Nosotros – preocupados por la educación de nuestra población escolar – convinimos con los maestros iqueños en no paralizar el dictado de clases, a pesar de que respaldábamos la propuesta de mejoras salariales para el magisterio. ¡Claro que los maestros estatales ganan muy poco, y merecen un aumento sustancial!
El hecho es que mientras todas – o casi todas – las regiones del país acataban la huelga magisterial, Ica no. En Ica las clases escolares transcurrían normalmente, sencillamente porque la máxima prioridad eran los niños y jóvenes escolares. Sin embargo, eso no le gustó a Castillo y mandó a cientos – miles – de matones con la orden de amedrentar a nuestros maestros con todo tipo de amenazas.
La huelga magisterial duró 80 largos días en casi todo el país… desde el 15 de junio hasta el 2 de setiembre de aquel año. Sin embargo, en Ica el magisterio paralizó sólo 22 días. Y paró porque los matones de Castillo – cual jauría de perros rabiosos – impidieron a la bruta que nuestros maestros y estudiantes pudieran asistir a las escuelas con un mínimo de seguridad.
Estamos pues ante un candidato que – de resultar elegido – nos llevaría a un régimen estatista, totalitario, elitista y violentista. Un candidato cuya personalidad es acomplejada, retrógrada y de mala entraña. Y cuyas propuestas de gobierno fracasaron en todo el mundo… y en nuestro país en los 70´s y 80´s. ¡Cómo no van a haber fracasado si sólo generaron pobreza, desabastecimiento, híper inflación, terrorismo, desempleo, corrupción y diáspora! Misma Venezuela con su Socialismo del Siglo XXI.
Ese es Castillo señores… el candidato que No sabe / No opina frente a temas básicos de política y economía. Pero que Sí sabe / Sí opina cuando se trata de propiciar actos vandálicos y alteraciones del orden público.
¡Un doble filo convicto y confeso! Lampadia