Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Lima, 2 de diciembre de 2022
Para Lampadia
La aprobación presidencial no es poca cosa: 20, 25, 30%. Por ahí va. ¿Sorprendente? No me parece. Más bien, lo que sí me parece sorprendente son las razones que dan muchos analistas para explicar tales niveles de aprobación presidencial.
¿Qué dicen los analistas al respecto? Pues que “la victimización le está dando resultados”. “El desprestigio del Congreso favorece al Presidente”. “Los Consejos de Ministros Descentralizados están jugando a su favor”. “La gente se identifica con el maestro provinciano”. “Es un hombre humilde y de familia”. Bla, bla, bla… Todo eso – y más – dicen muchos analistas sabelotodo para explicar la relativamente alta aprobación presidencial.
Bueno pues, yo tengo otra lectura de la situación.
El Presidente Castillo tiene un amplio respaldo entre las personas involucradas en el mundo delincuencial.
Particularmente, los involucrados en el mundo de las drogas: productores de hoja de coca, amapola y marihuana; procesadores de pasta básica de cocaína, clorhidrato de cocaína y heroína; proveedores de insumos para la elaboración de drogas, transportistas, mulas y “burriers”, distribuidores y comercializadores de drogas, capos de mafias, consumidores, drogadictos y demás. Incluso, el Presidente tiene un amplio respaldo de terroristas que – aparte de ser sanguinarios criminales – fungen de guachimanes de los cárteles del narcotráfico.
¡Cómo no va a tener respaldo el Presidente Castillo si él mismo ha ordenado la desactivación de todos los programas de lucha contra las drogas!
Por otro lado ¡cómo no va a tener el respaldo de todos los involucrados en la minería y tala ilegal, si su gobierno se ha enfrascado en perseguir a todos los mineros y madereros formales, sin tocar para nada a los mineros ilegales y madereros furtivos!
¿Qué decir del asqueroso mundo de la corrupción en el Estado, incluidos los corruptores del sector privado?
Para que se entienda bien. ¿De qué lado creen que están los miles de proveedores del Estado – incluidos contratistas y consultores – que están donde están, gracias a las coimas y sobornos que intercambian con funcionarios corruptos designados por el mismísimo Presidente Castillo?
Asimismo ¿de qué lado creen que están los políticos, dueños de universidades de dudosa reputación, algunos de cuyos exalumnos ostentan actualmente altos cargos en el Estado, sin haber recibido ninguna educación mínimamente adecuada… o peor aún, con plagios de tesis de por medio? Me refiero – por ejemplo – a la relación que existe entre el Presidente Castillo, Magister en Educación por la Universidad César Vallejo y César Acuña Peralta, dueño de la referida universidad. ¡Cuántos casos parecidos más hay entre universidades bamba y altos funcionarios del Estado! Todo eso cuenta en las cifras de aprobación presidencial.
Por todo ello ¡claro que el Presidente Castillo tiene 20, 25, 30% de respaldo! No tapemos el sol con un dedo. Gran parte del mundo ilegal y delincuencial lo respalda.
Más bien, alegrémonos de que su respaldo no sea mayor. En ese sentido ¡qué bueno que el 70% de los peruanos estemos en contra del Presidente Castillo y su pandilla! ¡Es extraordinario que una clara mayoría estemos en contra de un Presidente que pretende convertirnos en un narcoestado!
La pobreza – que para algunos, es un descaro moral – para muchos es una gran oportunidad de enriquecimiento. ¡Indignante! El narcotráfico – repito – gana mucho con la pobreza. Los pobres – hambrientos, sin oficio, desesperados – suelen ser presa fácil de los narcotraficantes. Poder ganar miles de dólares, tan sólo por llevar un paquete de aquí a allá… ¡cómo no caer en las garras del narcotráfico!
Y en cuanto a la minería y la tala ilegal. ¡Cuánto dinero! Miles de millones. Soles o dólares… da lo mismo. El hecho es que estamos hablando de un dineral. ¡Cuánta coima! ¡Cuánta plata debajo de la mesa! ¡Cuántas autoridades metidas en la colada! ¿Cuánta plata le llega al Número 1? Ufff… cualquier cantidad.
Este gobierno es el aliado perfecto de la corrupción y la delincuencia. Por eso tiene el respaldo que tiene. El narcotráfico y la minería y tala ilegal están de plácemes. Este gobierno no sólo no combate la delincuencia… la alienta. Este gobierno es parte de la delincuencia. Por eso tiene 20, 25, 30% de aceptación.
Por eso – precisamente – debemos respaldar la vacancia presidencial. No por ser izquierdista. No por ser estatista. Si no por pretender convertirnos en un narcoestado. En buena cuenta, debemos respaldar la vacancia del Presidente Castillo… por cínico, farsante, corrupto y todo lo demás.
Y si no cae esta semana, igual debemos insistir. Pero eso sí, apurémonos. Porque como acabo de explicar… a más delincuencia, más aprobación presidencial. Lampadia