En mayo del 2017 publicamos en Lampadia la Carta del Cobre a los peruanos. En ella, el Cobre hizo un análisis integral sobre sus capacidades y su potencial aporte a los peruanos.
Queridos peruanos,
(…) Es difícil creer que, en la actualidad, haya perdido tantos seguidores. Permítanme mostrarles lo que puedo aportar para su bienestar:
- La demanda de Cobre
- ¿Miedo al precio del cobre?
- Competitividad del Perú
- Valor agregado
- ¿Ser un recurso no renovable es malo?
- ¡No soy “tan solo” una materia prima!
- Nuestros vecinos sí aprovechan sus recursos
- Conflictos ambientales y sociales
- Hablemos de desarrollo
- Conclusiones
(…) tras tantas acusaciones falsas, he creído necesario defenderme y demostrar que mucho de lo que se afirma en contra de la producción de cobre, en particular, y de la minería en general son mitos y falacias interesadas.
¡Guardemos los mitos, iniciemos una cruzada nacional para desarrollar los proyectos de cobre y convertir al Perú en el gran país que todos podríamos construir!
A pesar de esa gran presentación del cobre en particular, y de la minería en general, el país siguió sin reaccionar a promover ‘como temas de interés nacional’ el desarrollo y puesta en marcha de los proyectos de cobre. Con un presidente de la República y algunos de sus colaboradores, como el entonces primer ministro, Fernando Zavala, conocedores del tema, el gobierno siguió acobardado por las campañas anti-mineras y la falta de profundidad de análisis de los medios, y no pudo articular una sola acción proactiva para explicar a los peruanos la importancia de la minería, y menos aún para acelerar las inversiones.
Inclusive, un buen economista, nada menos que el presidente del Consejo Fiscal, Waldo Mendoza, en una entrevista del diario El Comercio, en setiembre del año pasado, comentó que “La minería es un motorcito pequeño (…)”. Comentario que tuvimos que observar en Lampadia. (Ver: El “motorcito pequeño” de Waldo Mendoza). Pero, Waldo Mendoza, como hombre inteligente, enmendó luego su error: “Lo que es una sorpresa, por lo menos para mí, es cómo una sola variable, el precio del cobre, puede afectarnos tanto” (noviembre 2017, El Comercio, Salvo el cobre, todo es ilusión).
Cuando publicamos la Carta del Cobre a los peruanos (5 de mayo, 2017), el precio del cobre estaba en US$ 2.51 la libra. Pues está mañana el se cotizaba en US$ 3.24 la libra.
Es pues muy claro el gran aporte que el cobre puede dar a los peruanos. No nos olvidemos que hasta el presidente comunista de Chile, Salvador Allende, llegó a decir que “El cobre es el sueldo de Chile”
A pesar de que el gobierno no atina aún, a promover mayores inversiones mineras; en buena hora, tenemos empresas que tercamente, siguen apostando por desarrollar proyectos de cobre en el Perú. Un buen ejemplo de ello, es el de Southern Copper Corporation, la empresa mexicana, que a pesar del maltrato que recibió en relación a su proyecto de Tía María, ha seguido relacionándose con la población de la zona y explicando al país, los beneficios de su proyecto.
Lo que es más, Southern acaba de ganar la licitación del proyecto de Michiquillay en Cajamarca, ofreciendo un pago de US$ 400 millones y una regalía de 3%.
Ahora le toca al gobierno desarrollar una campaña inteligente para explicar a todos los ciudadanos cómo es que el país, en su conjunto, puede beneficiarse de las inversiones mineras, y de las del cobre en particular.
No es un momento para más cobardía. Es un momento para lucidez, compromiso y valentía. ¡Viva el Cobre y Viva el Perú! Lampadia