Después de dos rescates por un total de 240 mil millones de euros (US 266 mil millones) y seis años de depresión, recortes de gastos y pérdida de empleos, Grecia se pone al borde del colapso. El domingo, los griegos votaron por el “NO”, siguiendo la recomendación de su Primer ministro y rechazaron las propuestas de reformas y de austeridad que los acreedores europeos (Países, BCE y FMI) requirieron a cambio de nuevos préstamos que el país necesita para evitar el default y el colapso bancario. (Aunque las corridas bancarias ya han venido erosionando la solvencia del sistema). Ahora, la mayor preocupación es que este resultado podría sacar a Grecia de la zona euro y llevarlos a una recesión aún mayor.
El 61 % de los griegos votó ‘OXI’ (NO). Esto representa un impresionante rechazo a la austeridad solicitada por Europa. Sin embargo, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, ha prometido que Grecia será capaz de permanecer en el euro, a pesar de haber luchado arduamente por el “no”, ya que según él, este resultadole permitiría tener un mayor poder de negociación con los acreedores del país.
La situación llegó a tal nivel de enfrentamientos, que Yanis Varoufakis, su Ministro de Finanzas, declaró poco antes del referéndum: “Lo que están haciendo [los europeos] con Grecia tiene un nombre: se llama terrorismo.” Luego de lo cual, después de la votación, tuvo que renunciar, cosa que hizo via su blog personal afirmando que la “austeridad es como tratar de extraer la leche de una vaca enferma con azotes”. Su alejamiento debiera facilitar las negociaciones, pues evidentemente, ese lenguaje es inaceptable.
Pensionista griego Giorgos Chatzifotiadis, fuera de una sucursal de un banco nacional en Salónica el 03 de julio 2015
Un voto por el “si” habría mantenido a los bancos abiertos y les habría dado la opción de llegar a un acuerdo que reconozca las nuevas realidades griegas e incluir, como afirma ahora el FMI, la reestructuración de la deuda, pues de una u otra forma,es insostenible. Por otro lado, no hay que olvidar la responsabilidad de los gobiernos griegos, que pretendieron que el país viviera como Alemania, sin el esfuerzo, trabajo y generación de riqueza de los teutones.
Sin embargo, la situación actual de Grecia es crítica: los controles de capital impuestos antes del referéndum del domingo pasado han dejado al país con una gran escasez de alimentos y medicamentos (que son, en su mayoría, importados), y además la industria turística (la mayor fuente de ingresos de exportación del país) está sufriendo cancelaciones de hasta 40% por problemas de abastecimiento de los hoteles, ya que la prohibición de transferencias bancarias les impide pagar a sus proveedores. Además, el gobierno han puesto un límite de retiro de efectivo de 60 euros al día, un corralito parecido al argentino, antes de su default. También se ordenó que la bolsa de valores de Atenas se mantenga cerrada el martes y miércoles para evitar la especulación.
Estantes vacíos en los supermercados griegos, 5 julio 2015
«Las importaciones, las exportaciones, las fábricas, empresas, transporte… todo está congelado», dijo Vasilis Korkidis, el director de la Confederación Nacional de Comercio Helénico. Afirmó que la economía habría sufrido pérdidas valorizadas en € 1,200 millones durante la semana pasada y que este costo tendría que ser añadido a cualquier nuevo acuerdo de rescate. «Incluso en el mejor de los casos, tomaría meses recuperarse de la conmoción de los bancos cerrados y los controles de capital», agregó Korkidis.
Incluso con el país al borde del colapso económico, los funcionarios griegos afirman que el gobierno todavía está buscando se les exima de sus promesas de reformas para proteger sus intereses especiales: quieren mantener un descuento del 30 %del impuesto sobre el valor añadido en las islas griegas y retrasar los recortes de gastos de defensa. También se resisten a elevar el IVA en los restaurantes a 23 %, y quieren esperar hasta el 2019 para eliminar un suplemento de ingresos para los pensionistas más pobres.
Quieren seguir viviendo en la misma ‘sociedad de bienestar’ que los llevó a la crisis en primer lugar. El dispendio excesivo del gasto públicose agravó porasegurar apoyo electoral, se pidieron grandes préstamos a los mercados internacionales para financiar más puestos de trabajo en el sector público, pensiones y otros beneficios sociales. Esto acrecentó aún más el déficit fiscal. La deuda griega como porcentaje del PBI pasó de 126% en el 2009 a 175% en el 2014. Ver en Lampadia: La Sociedad del Bienestar llevada al extremo.
Sin embargo, según el mismo FMI, la deuda sería insostenible, ya que las finanzas de Grecia son prácticamente inviables. Sostiene que si el crecimiento es menor del 1% (creció solo 0.1% en el primer trimestre) o el superávit primario [saldo antes del pago de los intereses de la deuda] es inferior al 2.5% del PBI (fue del 1.7% en 2014) “sería necesaria una quita de deuda”, así como otorgar un periodo de gracia de 20 años a las deudas existentes y extender la vida de los créditos en vigor hasta 40 años. En el gráfico inferior se puede observar los principales acreedores de Grecia, siendo el 60% países de la zona euro, 10% el FMI y 6% el BCE.
No obstante, lo que está en riesgo es más que sólo el futuro de Grecia, que representa tan sólo el 2 % del PBI de la zona del euro. Si los bancos griegos se quedan sin dinero, el país se verá forzado a imprimir su propia moneda, lo que significaría que serían los primeros en abandonar el euro. Algunos temen que el precedente podría aumentar el riesgo de otros países del área, pero, ‘Grexit’, la salida de Grecia, puede ser mejor para todos: Europa quedaría más sana y con más capacidad de dedicarse a consolidar su recuperación económica; Grecia podría devaluar su moneda en vez de ajustar los precios reales, ser así más competitivo y tendría que esforzarse para reconstruir el país; los deudores irresponsables (Grecia) aprenderían que ‘no hay lonche gratis’ y; los acreedores, igualmente irresponsables, tendrían que asumir, de una vez por todas, las pérdidas de sus portafolios que solo contienen hoy, valores nominales.
En este contexto, el débil gobierno de Obama ha instado a Europa a llegar a un arreglo que evite la salida de Grecia de la zona del Euro. Los representantes de los paíse europeos han hecho declaraciones muy duras, pero al mismo tiempo, ya le dieron algunos días extras a Tsypras, para aparecer con mejores propuestas. Pronto veremos como termina esta dolorosa situación.
Los peruanos debemos siempre reflexionar sobre estos acontecimientos. Ver en L: Un remedio peor que la enfermedad -Des (Grecia) y reflexiones para el Perú. Lampadia