Hace 20 días publicamos en Lampadia ‘Putsch’ del Movadef (Sendero) en Cusco, afirmando: ante la debilidad mostrada por el gobierno para contrarrestar los levantamientos socio-políticos, los sindicatos y federaciones están llevando adelante una suerte de ‘putsch’ táctico para mejorar sus posiciones estratégicas.
Lamentablemente, el gobierno solo avanza para afirmar su debilidad. Sin el diagnóstico correcto, sin visión y sin capacidad política, la semana pasada claudicó y aceptó adelantar los aumentos ofrecidos al magisterio, sin la contraparte de un compromiso por la educación de parte de los maestros y anunciaron el reinicio de clases para hoy lunes. Sin embargo, las dirigencias del magisterio ya adelantaron que «la huelga continua». Efectivamente, hoy lunes no se reiniciaron las clases.
Fuente: rpp.pe
El gobierno anunció que los que no trabajen desde hoy, 7 de agosto, por tres días consecutivos, se les descontará. En otras palabras, les están perdonando los días no trabajados desde el inicio de la huelga. Además, no se conoce de arrestos, ni de una sólida acción de defensa del orden interno. A los maestros huelguistas y a los demás gremios en estado de protesta se les ha dado ‘licencia’ para hacer lo que quieran. Un verdadero papelón.
Llegó el momento de decir ‘BASTA’
Hace más de diez años se hizo evidente que el SUTEP, por su naturaleza, por su orientación política y por ser la mayor traba de una verdadera revolución educativa, debía ser transformado o liquidado. Máxime, en los tiempos de la nueva revolución tecnológica que nos trae cambios de paradigmas para el futuro inmediato y, por supuesto, para la educación.
Fuente: larepublica.pe
- Desde una perspectiva histórica es muy entendible que se formara un sindicato de maestros como el SUTEP. Como hemos explicado anteriormente, la hiperinflación iniciada en la dictadura militar destrozó la vida de los servidores públicos, los empobreció dramáticamente y los . (Ver en Lampadia: La tragedia de los servidores del Estado).
- Al entrar nuestra economía en un largo estancamiento, la única manera de lograr mejoras de ingresos u otras prebendas era organizarse y ejercer un poder de negociación superior al de otros estamentos de la sociedad, incluido el propio gobierno. Se había validado así el modelo ‘ganar-perder’ (si la torta no crecía, trata de llevarte todo lo que puedas).
- Luego de la recuperación de la economía peruana en los años 90, empezamos a crecer alto y sostenido y, por lo tanto, entramos a una nueva realidad donde el modelo general pasó a ser: ‘ganar-ganar’ (con el crecimiento, ya no era necesario arrancharse las migajas de una torta pequeña).
- El SUTEP, que ya había tomado una orientación política e ideológica bastante radical, mantuvo su enfoque, más cercano a los intereses del gremio y sus dirigentes, que a los de la educación.
- Sus estatutos, hasta el día de hoy, hablan de la ‘lucha de clases’:
“La ideológica del capitalismo neoliberal busca enajenar al trabajador y su clase, convertirlos en mediocres, erradicar su perfil clasista, con el propósito de perennizar su expoliación y explotación.
La clase trabajadora debe responder el reto de enfrentar el neoliberalismo, salir airoso, retomando la iniciativa en la lucha de clases”.
- Además, el SUTEP fue tomado por el Partido Comunista del Perú (Patria Roja), que ha venido enseñoreándose a lo largo y ancho por todo el Perú, manejando la institución política más activa del país.
- Así mismo, el SUTEP capturó la Derrama Magisterial, un fondo de apoyo social a los maestros que ahora maneja más de mil millones de soles y se financia con descuentos ‘voluntarios’ a los maestros.
- Durante los últimos años, Patria Roja ha ido perdiendo el control del sindicato unitario, pues organizaciones políticas, aún más radicales que el propio SUTEP, le están disputando el control. Entre estas, está el CONARE del Movadef, la Organización de fachada de Sendero Luminoso.
- Hemos llegado al punto en el que el gobierno se ve forzado a apoyar al Partido Comunista del Perú para evitar el empoderamiento de grupos filo terroristas en el control del magisterio.
Es claro que los últimos gobiernos han tenido una suerte de alianza con el SUTEP, una especie de ‘guerra fría’, en que ninguna de las partes iba a la confrontación total, cuidando el corto plazo sin importar la suerte futura de los estudiantes.
La nueva realidad y la revolución educativa
En Lampadia hemos insistido en la necesidad de transformar los paradigmas educativos si queremos nivelarnos con los estándares educativos de los países más avanzados y enfrentar los retos que traerá la cuarta revolución industrial a nuestros pobres. Hemos hablado de un ‘Pacto Social por la Educación’. Pero nada mueve el entendimiento ni la acción del ambiente educativo oficial. Las autoridades no escuchan y las cosas no cambian.
Nuestras Propuestas
- Declarar en emergencia la educación escolar. Esta declaración tendrá que considerar los aspectos necesarios para privilegiar la educación de siete millones de estudiantes sobre los de dirigencias sindicales alejadas de un ejercicio gremial correcto.
- Descontar todos los días no trabajados.
- Quitar el reconocimiento del Estado al SUTEP, todas sus derivaciones, al CONARE y a todos sus sindicatos relacionados a la educación escolar.
- Suspender el reconocimiento de todos los sindicatos de maestros por un período de cinco años
- Afiliar a los maestros al ‘Pacto Social por la Educación’, ofreciendo buenos salarios, capacitación, tecnología e infraestructuras adecuadas, a cambio de la despolitización del magisterio y la aceptación de la meritocracia y su compromiso con la calidad educativa.
- Ofrecer un 10% de aumento adicional a los maestros que se afilien al Pacto y devolver los descuentos por la huelga.
- Despedir definitivamente a todos los líderes violentistas de los sindicatos, a los maestros que firmaron en apoyo al Movadef.
- Suspender definitivamente las retenciones de las remuneraciones de maestros a favor de la Derrama Magisterial por parte del ministerio y autoridades regionales. Si los maestros desean hacer aportes futuros, tendrán que hacerlos voluntaria e individualmente de sus remuneraciones netas.
Para salvaguardar el año escolar, habrá que organizar una campaña masiva de educación a distancia (por internet) y convocar el apoyo de toda la sociedad para superar un momento muy difícil, pero que estará encaminado a establecer las nuevas bases de la educación escolar en el Perú: La educación de excelencia con los mejores procesos educativos y la dignificación del maestro que, en pocos años, debería pasar a ser respetado por todos los peruanos y altamente compensado.
Como dice la sabiduría popular: «Más vale un momento colorado, que cien amarillos.» Lampadia