—La reciente administración al mando de Concytec busca construir un ecosistema de ciencia, tecnología e innovación que trabaje de modo articulado. Admite que a la fecha hay muchas trabas legales y administrativas del propio Estado que afecta a que se construya una cadena de la innovación. Entrevista realizada por Rocío Barja.
Lograr la tan ansiada y esquiva competitividad del país está íntimamente ligado al desarrollo de la innovación y la tecnología. ¿Cómo se está realizando este trabajo desde Concytec?
Establecer una política de ciencia, tecnología e innovación que vaya de acorde con el crecimiento del país nunca es fácil, ni siquiera para los países desarrollados. En el caso de Concytec, debe quedar claro que las políticas que se dan no sólo salen de nuestras cabezas sino que deben responder a la demanda de tecnología de las empresas, así como a la del sector público (entidades y ministerios). Al menos, eso es lo que está intentando imprimir la actual gestión: que las decisiones de políticas estén basadas en evidencia real.
¿Qué tan difícil es eso?
Complicado. Por eso en Concytec hemos implantado la política de evitar el conflicto de interés en la aprobación de los financiamientos a diversos proyectos de investigación de empresas. Por dicho motivo, nosotros no intervenimos en la aprobación de proyectos y tampoco nos enteramos qué proyectos son aprobados ni que empresas están participando en los concursos de selección. Es mejor así.
Ahora, ¿qué tan difícil le resulta a una empresa hacer investigación para mejorar un producto existente o crear uno nuevo?
El tránsito de una investigación hacia una innovación o producto específico es muy largo en el Perú, puede tomar hasta 10 años, dependiendo del sector. Uno de los motivos de esta realidad es que el Estado no ha fomentado esta práctica, precisamente por los pocos fondos con los cuales se contaba hasta hace algún tiempo.
¿Ello quiere decir que el tiempo para que un proyecto se convierta en un producto real depende sólo del factor financiamiento?
Definitivamente que no. Se requiere también de una institucionalidad que actualmente no existe en el Estado peruano, y que por ejemplo si lo tiene Chile. Un caso interesante es el del salmón, donde el gobierno chileno fue el primero en apostar en la investigación para su cultivo y luego las empresas, cuando vieron que era exitoso se lanzaron a invertir.
Adicionalmente a la falta de institucionalidad existen otros factores que afectan a que en el país se construya una cadena de la innovación…
Si. En este momento hay muchas trabas legales y administrativas que impone el propio Estado. Ahí tenemos por ejemplo, el hecho que haya universidades en las regiones que reciben canon y no lo utilizan, eso tiene que cambiar. Otros problemas son la falta de coordinación entre universidades y la OSCE así como las trabas para contratar personal extranjero en las labores de investigación.
Con todos estos problemas cualquiera diría que sería mejor no investigar…
Lamentablemente en el Perú en los últimos años, las empresas han innovado por su cuenta sin la ayuda del Estado. Recién a partir de esta gestión lo que se está tratando de hacer es brindar un apoyo a la innovación pero eso requiere de recursos importantes.
¿Y eso porqué?
Quizá la parte más costosa del desarrollo de una innovación no es tanto la investigación aplicada sino como se llevan esos conocimientos a productos concretos. Hay muchas innovaciones que de repente no cuestan nada pero hay otros casos que se requiere un trabajo mucho más laborioso.
Eso quiere decir que el financiamiento del Estado no es suficiente…
Así es. La innovación no es una tarea trivial sino sumamente complicada. Requiere del apoyo de varias instituciones, no solamente del Estado. También se necesita de fuentes externas de financiamiento que provienen del sector privado. Ellas que conocen el mercado saben que si bien los retornos pueden ser muy altos, los riesgos también lo son.
Hablando de la mortandad de los proyectos de investigación o innovaciones, ¿cuántos llegan a concretarse?
Si bien no hay datos exactos de Perú, podemos afirmar que en general a nivel internacional estamos hablando que del 100% de estas iniciativas sólo el 5% llega a concretarse como productos exitosas y son introducidos en el mercado.
Este porcentaje es muy bajo, ¿verdad?
No tanto. Nosotros creemos que la mortandad de proyectos de innovación hasta que se llega finalmente a innovaciones concretas dentro del mercado es sumamente bajo. Sin embargo, allí entran a tallar los capitales de riesgo quienes ven una oportunidad para maximizar sus ganancias. Ellos saben que probablemente sólo el 10% de lo que financien será realmente exitoso, pero eso no les preocupa porque saben que la rentabilidad que ganen superará cualquier perdida que hubieran tenido.
La agenda pendiente
Uno de los pedidos planteados por la actual administración de Concytec al MEF es que les incremente el presupuesto para el 2014. ¿Qué cambios se darían de aprobarse esta solicitud?
El pedido de aumento de presupuesto está íntimamente ligado a mejorar nuestra tarea como ente rector de la ciencia y tecnología en el país. En ese sentido, estamos proponiendo la creación de una línea de financiamiento para el fortalecimiento de oficinas de transferencia tecnológica. Estas oficinas son los lugares donde las empresas van cuando tienen necesidad de innovar. Es el link entre el know how de la tecnología y la demanda de las empresas.
¿Qué otros aspectos están contemplando?
También estamos viendo la necesidad de crear dos direcciones: una vinculada a la evaluación y seguimiento de los proyectos y políticas, así como otra de Estudios Económicos.
Eso quiere decir que hasta la fecha, el Concytec no ha realizado seguimiento a los proyectos en cartera…
No tanto así. Si se ha realizado una evaluación pero ha sido sobre todo desde el punto de vista administrativo. Lo que ahora buscamos con esta nueva dirección es una radiografía del verdadero curso que siguen los fondos públicos destinos a la innovación y tecnología.
Y en el caso de la dirección de Estudios Económicos, ¿Qué se busca lograr con ella?
Lo que buscamos es tener data del sector que actualmente no se tiene. Por ejemplo, cuántos investigadores existen actualmente en el país, en que universidades están, entre otros temas. Para esta oficina se ha conversado con Ricardo Hausmman, director del Centro para el Desarrollo Internacional (CDI) de la Universidad de Harvard, quien será nuestro partner. Lo que nos falta ahora es encontrar a una persona en Perú que se encargue de ejecutar las sugerencias de Hausmann.
Con todos los cambios que se vienen para el Concytec, ¿cuál es el estimado de inversión del Estado que prevé alcanzar al 2014 en términos de inversión en innovación y tecnología?
Actualmente se dice que la participación de la innovación y tecnología como porcentaje del PBI del país asciende al 0.15%, nivel muy por debajo a lo estimado para la región que es del 0.6%.
Ahora, nosotros estamos convencidos que al cierre del 2014, ese porcentaje subirá al 0.23%, lo cual será todo un logro ya que por años nos hemos visto estancados. Ahora realmente sentimos un cambio de mirada en el tema.
Publicado por Gestión, 1 de agosto del 2013