Quizás lo más importante para determinar el atractivo para invertir en un país es su situación económica o estabilidad política. Ya sabemos que el PBI es la manera más holística de medir el progreso nacional de los países, ya que nos dice si un país está mejorando y el PBI per cápita se ha convertido en la medida definitiva del éxito de las naciones. El WEF (por sus siglas en inglés) busca ampliar el espectro de cómo medir la riqueza de un país e identificar cuáles son las economías más incluyentes, mediante un indicador adicional que debe ser considerado complementario al del PBI.
En este sentido, el Foro Económico Mundial ha creado un índice llamado Inclusive Development Index que recoge aquellos aspectos que hacen de una sociedad un mejor lugar para vivir porque los beneficios generados por la actividad económica se reparten de una forma más equitativa entre la población. Se basa en tres pilares:
- Crecimiento: mide cuál es el crecimiento económico del país en términos totales.
- Inclusión: estudia cuáles son las diferencias existentes entre aquellas capas de la población con mejor situación respecto aquéllos que pasan con más dificultades.
- Igualdad intergeneracional: trata de las posibilidades y bienestar que encuentra la generación posterior respecto la de sus padres y abuelos.
El Índice de Desarrollo Inclusivo (IDI) es una evaluación anual del desempeño económico de 103 países que mide cómo los países se desempeñan en: Crecimiento y Desarrollo, que incluye aumento del PBI, participación en el mercado de trabajo y productividad, y esperanza de vida sana; Inclusión, que engloba ingresos medios por familia, pobreza y dos medidores de desigualdad, e Igualdad intergeneracional y Sostenibilidad, que incluye ahorro neto ajustado (junto con reducción del capital natural e inversión en capital humano), ratio de dependencia demográfica, deuda pública e intensidad de carbono.
Fuente: WORLD ECONOMIC FORUM
La IDI es un proyecto de la Iniciativa del sistema del Foro Económico Mundial sobre el futuro del progreso económico, que pretende informar y posibilitar el progreso económico sostenido e inclusivo mediante una cooperación público-privada más profunda, mediante el liderazgo y el análisis del pensamiento, el diálogo estratégico y la cooperación. El informe afirmó que: «[Ha surgido] un consenso mundial sobre la necesidad de un modelo de crecimiento y desarrollo más inclusivo que retenga las enseñanzas fundamentales del pasado sobre la eficiencia asignativa de los mercados, la importancia de la estabilidad macroeconómica y la suma positiva de los beneficios del juego de la especialización e intercambio internacional».
¿Cuál es el desempeño del Perú?
El Perú se encuentra en el puesto 14 entre los países emergentes con mejores notas en inclusión social. En el apartado de “economías emergentes”, Perú figura en el puesto 14, solo siendo superado en América Latina por Uruguay (6), Panamá (8), Costa Rica (9), Chile (10) y Argentina (11). A su vez el Perú supera a Paraguay (19), República Dominicana (28), México (29), Nicaragua (32), Colombia (33), El Salvador (41), Brasil (39), Bolivia (37), Guatemala (46) y Honduras (48).
Fuente: WORLD ECONOMIC FORUM
Perú, Panamá, Uruguay y Chile figuran entre las economías emergentes más incluyentes, al registrar progresos a la hora de traducir sus políticas en una reducción de la desigualdad y fomentar así la inclusión social, indica el documento del Foro Económico Mundial.
Fuente: WORLD ECONOMIC FORUM
El Perú se ubica en el quinto superior entre las economías emergentes en términos de empleo, intensidad de carbono y deuda pública. Del mismo modo, el informe muestra que Perú se ubica entre los diez primeros en lo que respecta al PBI per cápita, la esperanza de vida y el ingreso medio.
Fuente: WORLD ECONOMIC FORUM
¿Cómo se desempeñó el resto del mundo?
Este índice busca darle un sentido más integrador al desarrollo económico. Algunos países obtuvieron una puntuación significativamente mejor en la IDI que en el PBI per cápita, lo que sugiere que han logrado que su crecimiento sea inclusivo: Camboya, República Checa, Nueva Zelanda, Corea del Sur y Vietnam. Por otro lado, otros países tienen clasificaciones de IDI significativamente más bajas que su PBI per cápita, lo que indica que su crecimiento no se ha traducido tan bien en la inclusión social; como Brasil, Irlanda, Japón, México, Nigeria, Sudáfrica y Estados Unidos.
Muchos países tienen un alto potencial para aumentar simultáneamente el crecimiento económico y la equidad social. Pero activar el círculo virtuoso del crecimiento inclusivo de manera más completa requerirá que cambien su enfoque hacia “una reforma estructural, rehaciéndola como un proceso de mejora continua dentro de un ecosistema diverso de políticas e instituciones de demanda y oferta, el efecto combinado del cual es difundir oportunidades, ingresos, seguridad y calidad de vida como parte del proceso de crecimiento”.
Fuente: WORLD ECONOMIC FORUM
Para muchos países, un proceso reinventado de reforma estructural también puede ser la mejor manera de acelerar su ritmo de crecimiento en el contexto actual. Podrían impulsar el consumo y la creación de empleos a corto plazo mientras aumenta el potencial de crecimiento de la economía a largo plazo a través de mejoras duraderas en la productividad laboral, la inversión y la innovación.
Algunas conclusiones
Richard Samans, miembro de la Junta Directiva del Foro Económico Mundial, afirmó que “existe un consenso global en torno al crecimiento integrador, pero hasta la fecha ha sido mucho más orientativo que práctico. Para responder de manera más eficaz a las preocupaciones sociales, las políticas económicas necesitan una nueva brújula, avances amplios en el nivel de vida y un nuevo mapa mental en el que se replantee la reforma estructural y se aplique a esta tarea. Asimismo, los principales asesores económicos y los ministros de finanzas han de priorizarlo tanto como su enfoque tradicional de las políticas macroeconómicas, de supervisión financiera y comerciales”.
El mayor crecimiento económico global inclusivo es una oportunidad para los países emergentes y en desarrollo, que actualmente están sufriendo por una desaceleración en la tasa potencial de crecimiento, principalmente debido a un debilitamiento en el crecimiento de la productividad.
Ya hemos comentado (En busca del tiempo perdido – ¡Ahora!) la tragedia que significa para el Perú, estar perdiendo estos años tan propicios para consolidar nuestro desarrollo integral y sostenible. Lampadia