Pablo Bustamante Pardo
Expresidente de IPAE
Director de Lampadia
Empezamos el año con grandes oportunidades que contrastan con las múltiples crisis que nos aquejan. Bendito país, que, en uno de los peores momentos de su historia, puede mirar adelante e identificar magníficas oportunidades para darle la vuelta al estancamiento económico, a la fuga de talentos y al empobrecimiento de nuestra gente.
No voy a revisar los componentes de nuestra crisis, es lo único que vemos todos los días en los medios de comunicación, y en la cara de nuestra clase dirigente.
Voy a resaltar las grandes oportunidades que nos permitan mañana gritar:
¡Vale un Perú!
Pero primero debemos dejarnos de hacer propuestas políticas maniqueas que solo buscan la consolidación de espacios de poder ajenos al espíritu luchador y patriota de la gran mayoría de peruanos.
También debemos asumir nuestra realidad. Podemos tener un gobierno débil y desorientado, un Congreso que no convoca sentido de gobernanza, y un sistema judicial que se cae a pedazos y no ofrece justicia al ciudadano; pero es lo que tenemos.
Con eso, podemos analizar opciones de políticas públicas y comunicar al conjunto de la población, las grandes oportunidades que Dios y los astros ponen nuevamente en nuestras manos.
Veamos:
- El calendario electoral al 2026, nos permite hacer:
Reformas políticas que mejoren la gobernanza
Reformas económicas y laborales que promuevan crecimiento económico y una formalidad incluyente con mejoras sociales
Dos años, el 2024 y 2025, para hacer una gran campaña de comunicación que muestre las grandes capacidades del Perú para invertir, crecer, reducir la pobreza y la desigualdad, y ser uno de los mejores países del mundo para vivir
- El crecimiento de la economía global es favorable para el Perú
- La demanda de inversiones en la producción de cobre permite generar crecimiento, empleos de calidad y recursos fiscales importantes
- La relocación de inversiones desde China nos permite avanzar en el valor agregado de nuestras exportaciones mineras
- La demanda del turismo regional e internacional permiten la recuperación de esta importante actividad, con especial impacto en oficios de rango medio
- La consolidación de la oferta agroexportadora coincide con una demanda sofisticada y creciente
- Con el cambio de unos cinco ministros (Economía, Salud, Energía y Minas, Trabajo e Interior), se puede mejorar sustancialmente el gabinete
- Los recursos fiscales que se generarían de lo anterior, permitirían importantes mejoras en educación, salud e infraestructuras
- La misma crisis, el empobrecimiento actual y la emigración de nuestros hijos permiten centrar la atención de los ciudadanos en temas fundamentales para el futuro y menos en los jaloneos políticos
- Los resultados de las políticas estatistas y socialistas de los últimos 20 años permiten comprobar, como lo han hecho los argentinos en su última elección, que la falta de libertad para invertir, la sobre regulación y las políticas anti inversión, solo empobrecen y alimentan a la ‘casta’
Pero todo esto no está actualmente en la agenda del gobierno ni de la clase política. Solo queda recurrir a lo que queda de nuestra clase dirigente, que debe salir adelante, sin cobardía, con terquedad y derrochando amor por nuestro país.
Ya es hora de que juntos empecemos a construir una visión de país y que, en algunos años, todos nos sintamos orgullosos de ese grito olvidado de:
¡Vale un Perú!!!
Lampadia