Por: Jorge Yzusqui
Perú21, 11 de noviembre de 2020
Este año 2020, una de las cifras más preocupantes en torno a la educación es la referida a la deserción estudiantil a todo nivel.
El Ministro de Educación, Martín Benavides, ha estimado que serían unos 300,000 los escolares fuera de educación básica regular. Por su lado, Daniel Contreras, especialista de Educación de UNICEF, ha señalado que las cifras de deserción escolar deben verse de manera conjunta y no separarse entre los sectores público y privado. En el 2019, la cifra de deserción estaba alrededor del 7.5% y para este 2020, UNICEF estima que la deserción estará alrededor del 20%.
Por el lado de la educación superior, no hay cifras muy alentadoras. El 15% estudiantes dejaron sus carreras durante la pandemia, y además, se estima que en el siguiente semestre, la deserción universitaria llegaría a un 35%. En este nivel de educación, se calcula que, durante este segundo semestre del 2020, 350 mil estudiantes en universidades dejarán de estudiar y 250 mil en institutos tecnológicos.
¿Cuál es la agenda educativa que se debe impulsar? Lo primero a tener en cuenta es que toda acción debe impulsar el fortalecimiento del sistema educativo de manera integral: el lado público como el privado, pues ambos son los que sostienen la educación a nivel nacional.
Dejemos de lado la comparación público-privado y la sobre regulación de lo privado. Debemos ver cómo mejoramos ambos sistemas y cómo hacemos para que ningún peruano se quede sin estudiar. Pensemos en ver cómo cerramos las brechas de género y urbano-rural, en preparar a nuestros docentes, asegurar la calidad en toda institución educativa y en formar a nuestros estudiantes para que enfrenten con éxito el futuro. Pongamos en el centro a los alumnos y tomemos decisiones basadas en lo que es mejor para los estudiantes.