Por: Jorge Yzusqui
Perú21, 29 de enero de 2021
El nuevo confinamiento no es una buena noticia para nadie y es el resultado de los impactos que viene generando la segunda ola de la pandemia en nuestro país. Una vez más, esta crisis nos reta como ciudadanos y como sociedad. La única manera de salir adelante es trabajando en conjunto. La responsabilidad, solidaridad y empatía deben ser los valores rectores en estos tiempos.
El rol de formación es compartido entre familias y escuelas, somos aliados en esta importante tarea. Por ello nos toca desde cada uno de nuestros roles promover los valores que forman una ciudadanía sólida, que desarrolla diariamente empatía y resiliencia.
El reto es mayor cuando ya tenemos un anuncio del Ministro de Educación sobre un inicio de año escolar 2021 en modalidad virtual. La alianza entre la escuela y las familias debe enfocarse ahora en darles el soporte necesario a los niños y adolescentes. Debemos sacar lecciones aprendidas del año anterior y evitar caer en los mismos errores. Es necesario acompañarlos en este nuevo año escolar con una mirada propositiva, que promueva su autonomía y que los motive a seguir aprendiendo. No es un reto sencillo, pero no podemos renunciar a él y tenemos claro que encontramos en las familias a nuestros mejores aliados.
Desde el sector educación sabemos que nuestro rol va más allá de la formación académica y seguiremos promoviendo los valores que permitan una mejor convivencia, en la que debe primar el interés colectivo sobre el interés individual. La crisis se ha prolongado mucho más de lo esperado y es claro que estamos agotados, pero tenemos la responsabilidad de ser el modelo e inspiración para nuestros hijos e hijas.