Eduardo Ferreyros
Presidente de la Sociedad Nacional de Pesquería
Correo, 21 de marzo del 2025
De un tiempo a esta parte, se ha discutido sobre las áreas naturales protegidas (ANP) con guiones falsos y desconociendo lo que verdaderamente son. Un ANP es un espacio geográfico terrestre o marino donde existe una diversidad de recursos naturales que el Estado protege.
Una reserva nacional es un ANP donde, están permitidas las actividades económicas y el aprovechamiento sostenible de recursos naturales según sus planes de manejo. Por eso es falso lo que dicen algunos actores y deportistas, que se han creído las mentiras de ciertas ONG financiadas desde el extranjero, que quieren imponer una agenda que busca acabar con la pesca industrial; ignorando que la Reserva Nacional de Paracas, ha convivido desde su creación con actividades económicas, entre ellas la pesca; a diferencia de un parque nacional, o un santuario; que son espacios intangibles.
Lo que sorprende es que las ONGs, como Oceana, que están muy activas movilizando campañas y promoviendo demandas para eliminar la pesca industrial en ANP, no se conmuevan con los delitos ambientales reportados. En Paracas y otras reservas vienen ocurriendo cosas graves que convenientemente callan; como, por ejemplo, la pesca que se realiza al interior de la reserva sin control y utilizando dinamita; la caza indiscriminada de aves, tortugas y lobos, la ausencia de tratamiento de residuos locales, etc.
En lugar de luchar todos juntos contra el enemigo común, algunos se dejan seducir por mensajes falsos de algunas ONGs, que rinden cuentas a sus financistas extranjeros con una agenda que nadie conoce y poco les importa el desarrollo sostenible de nuestro país, al pretender eliminar la pesca industrial que sostiene a 250 mil trabajadores.