Pablo Bustamante Pardo
Expresidente de IPAE
Director de Lampadia
“El trabajo del trío “nos había ayudado a entender las diferencias en prosperidad entre naciones” al mostrar que las sociedades con un pobre estado de derecho [rule of law] e instituciones que explotan a sus poblaciones pueden tener dificultades para generar crecimiento.
El comité Nobel añadió que sus observaciones demostraban que las democracias eran “en promedio, a largo plazo… mejores para promover el crecimiento””.
Con el anuncio del Premio Nobel de Economía, una vez más, los peruanos recibimos con claridad el mensaje sobre la importancia de la economía de mercado y la democracia liberal para la prosperidad de las naciones, pues es el espacio de vida social que genera crecimiento económico.
Y el crecimiento económico se genera por la inversión privada, el 80% de la inversión total. Como hemos repetido infinidad de veces, nuestro crecimiento se interrumpió el 2011 con el gobierno de Humala, como dice hoy Gianfranco Castagnola (ver en Lampadia):
“Empezamos a ningunear el crecimiento económico, se instauró un pensamiento en los gobiernos central, regional y local de que no hay que facilitar la inversión privada, que lo vemos hasta hoy. Lo podemos ver en gobiernos locales o regionales tanto de zonas relativamente pobres, como también en Miraflores, San Isidro y La Molina, donde hemos apreciado actitudes muy hostiles a la inversión privada”.
No nos dejemos confundir por los enemigos de la prosperidad. Nuestra prioridad, no lo único, es promover el crecimiento económico.
Sobre la riqueza de las naciones
Trío de economistas ganan el Premio Nobel por su trabajo sobre la riqueza de las naciones
Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson recibieron elogios por promover la comprensión de la desigualdad
Financial Times
Delfina Strauss
Traducido y glosado por Lampadia
El Premio Nobel de Economía 2024 ha sido otorgado a los académicos Daron Acemoglu, Simon Johnson y James Robinson por su trabajo sobre las disparidades de riqueza entre las naciones.
Acemoglu y Johnson son profesores en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, mientras que Robinson es profesor en la Universidad de Chicago.
Se les elogió por su labor sobre el impacto de las instituciones y el estado de derecho [rule of law] en la prosperidad de los países.
«Los galardonados de este año han sido pioneros en nuevos enfoques, tanto empíricos como teóricos, que han mejorado significativamente nuestra comprensión de la desigualdad global», afirmó el miembro del comité Nobel Jakob Svensson.
“Reducir las enormes diferencias de ingresos entre países es uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo”, añadió.
Svensson dijo que el trabajo del trío “nos había ayudado a entender las diferencias en prosperidad entre naciones” al mostrar que las sociedades con un pobre estado de derecho e instituciones que explotan a sus poblaciones pueden tener dificultades para generar crecimiento, [la base indiscutible de la prosperidad].
Aunque los galardonados no propusieron “recetas sencillas ni propuestas políticas concretas”, su trabajo tuvo un “enorme impacto social”, afirmó.
El comité Nobel añadió que sus observaciones demostraban que las democracias eran “en promedio, a largo plazo… mejores para promover el crecimiento”.
El comité destacó que, si bien los tres trabajaban en universidades estadounidenses, ninguno era estadounidense. Acemoglu nació en Turquía y sus dos colegas en Gran Bretaña.
Hablando desde Atenas, Grecia, después de que se anunció el premio, Acemoglu dijo que el trabajo del trío podría resumirse mejor como el estudio del “experimento natural” creado por el colonialismo.
Esto ha “dividido al mundo en trayectorias institucionales muy diferentes”, dijo, con países que siguieron caminos distintos dependiendo de los recursos que los colonos europeos habían traído consigo y las estrategias que adoptaron.
“En términos generales, el trabajo que hemos realizado favorece la democracia”, dijo Acemoglu.
Agregó que si bien el reciente éxito de China en los sectores de alta tecnología fue “un poco desafiante” para sus conclusiones, “nuestro argumento ha sido que este tipo de crecimiento autoritario es a menudo más inestable”.
Acemoglu nació en Estambul y estudió en el Reino Unido, recibiendo su maestría y doctorado en la London School of Economics después de realizar estudios universitarios en York.
El economista turco-estadounidense comenzó su carrera académica en la London School of Economics antes de trasladarse al MIT. En 2005, ganó la medalla John Bates Clark, que la American Economic Association otorga al economista estadounidense más prometedor menor de 40 años.
Acemoglu trabajó con Robinson en el exitoso libro Por qué fracasan los países.
Johnson nació en Sheffield, pero ha pasado su vida laboral en Estados Unidos. Antes de incorporarse al MIT, trabajó en el centro de estudios Peterson Institute, con sede en Washington, y fue economista jefe del FMI entre 2007 y 2008.
Recibió su doctorado del MIT, después de completar una maestría en la Universidad de Manchester y una licenciatura en la Universidad de Oxford.
Robinson, que tiene ciudadanía británica y estadounidense, recibió títulos de la LSE y Warwick antes de completar un doctorado en Yale.
Está en la Universidad de Chicago desde 2015 y anteriormente trabajó en la Universidad de Harvard.
Lampadia