“No hay nada imposible para aquel que lo intenta”
Alejandro Magno
Pablo Bustamante Pardo
Expresidente de IPAE
Director de Lampadia
¿Por qué nos conviene a todos, ricos y pobres, crecer juntos, y hacerlo en el Perú?
- A los peruanos que piensan emigrar
En los últimos tiempos, muchos peruanos han emigrado en búsqueda de mejores condiciones de vida. Lo han hecho muchos ricos, llevándose su dinero y su afán de crear empresas. Lo han hecho muchos jóvenes, llevándose su potencial de desarrollo. Y lo han hecho muchos pobres, llevándose su afán de superación.
A todos ellos los necesitamos acá, en la patria.
Y a todos ellos les convendría más, quedarse en el Perú, si recuperamos la capacidad de crecer, de invertir, de ahorrar, de mejorar la educación y la salud, de tener menos delincuencia, de mejorar nuestras infraestructuras, y de mejorar la justicia.
A los ricos porque, la plata nunca te dará el sentido de pertenencia que se tiene en el Perú, siempre serás un extranjero, sin tu familia y sin tus amigos, y no tendrás las mismas oportunidades de desarrollar nuevos negocios.
A los jóvenes porque, es acá donde se puede hacer ‘la América’. Acá puedes ir para más, acá tienes mejores oportunidades de asociarte con amigos o familiares para emprender, acá no tienes que refugiarte en oficios que no están a la altura de tus ambiciones.
A los pobres porque acá están tus redes familiares y amicales, tus querencias y tus costumbres, y acá puedes dar fruto a tu gran afán de superación, sin sentirte de paso y sin sentirse menos. Veamos sino las miles de historias de superación de pobres que fueron.
A los que están en el Perú
- A los peruanos de mejor condición económica
Porque si no crecemos juntos, el ambiente social siempre será precario y con desigualdades, que serán el caldo de cultivo de los vendedores de cebo de culebra, de los populistas, de los socialistas y de los farsantes.
- A los jóvenes
Porque si no crecemos juntos el crecimiento no será sostenible y tendremos menos oportunidades de prosperar.
Porque si no crecemos juntos, muchas de nuestras regiones se quedarán en la saga, y nos llevarán a dejar las tierras que tanto queremos.
En cambio, si crecemos juntos, habrá muchos empleos y emprendimientos, y en el Perú rural, podremos tener la calidad de vida de los pobladores del sector rural de Francia. Porque un Perú con buenas infraestructuras y servicios públicos, más inversiones en el desarrollo de todas las riquezas que tenemos a lo largo y ancho del país, nos puede dar múltiples oportunidades de desarrollo personal, en tu propia tierra.
- A los pobres
Porque si crecemos juntos tendrás trabajo y podrás prosperar. Si no crecemos juntos, no invertiremos ni creceremos lo suficiente, y tarde o temprano, caeremos en las garras del socialismo, que con sus falsos profetas podrán tomar el poder para hacer lo mismo que han hecho siempre en toda la historia y en todos los lugares del planeta, empobrecer a la población para mantenerla cautiva de dádivas, mientras los jerarcas del socialismo se empoderan, se enriquecen con tu pobreza, dando patente de corso a todas las actividades criminales, y con ellos, serán finalmente tus carceleros.
Si no crecemos juntos, los pobres serán cada vez más pobres.
Como están las cosas, los invito a reflexionar sobre el sombrío panorama de todos los peruanos si no crecemos, algo que solo podemos hacer todos juntos.
También los invito a reflexionar y a soñar, sobre lo bien que nos puede ir con buenos líderes, que nos hagan ver que nuestras mejores oportunidades de estar bien, de prosperar y de asegurar un gran lugar para las vidas de nuestros hijos, están en el Perú, creciendo juntos.
Como crecer juntos
Para crecer juntos tenemos que evitar caer de rehenes de las ideologías de la pobreza y el resentimiento, tan comunes a las izquierdas (ver en Lampadia el discurso de Oscar Arias, presidente de Costa Rica en la V Cumbre de las Américas: “Algo hicimos mal”, y procurar entender los lineamientos básicos que crean los espacios de prosperidad que ya lograron muchos países en todas las regiones del planeta, y que hoy tienen economías de mercado exitosas y democracias funcionales.
Ese ambiente pasa por ser predecibles, por respetar los contratos, y por supuesto, por alentar la inversión privada, la base de una mayor oferta de empleos, mejores ingresos y mayores recursos fiscales, pasa por tener buenos servicios públicos y un Estado efectivo y meritocrático, focalizado en brindar seguridad, estabilidad macroeconómica y regulatoria, con funcionarios capaces e íntegros.
Lampadia