Entrevista a Juan Carlos Tafur
El Comercio, 28 de abril del 2024
Por: Milagros Leiva
El periodista sigue pensando que el allanamiento que le hicieron fue una venganza de la fiscal Marita Barreto. Cree que en el Ministerio Público debe existir una reforma absoluta. Reconoce que cometió un error al reunirse con Patricia Benavides y otros personajes. Error, pero no delito.
Has dicho qué el allanamiento a tu domicilio es básicamente una venganza de la fiscal Barreto, por la información que diste sobre ella en el portal Sudaca. Ella te ha contestado, en un comunicado, que no está colisionando con la libertad de expresión; que solo está haciendo su trabajo…
Yo mantengo la tesis de que en la fiscal Marita Barreto hay una indisposición personal que se ha manifestado en la incautación de mis bienes. Claramente, lo que está buscando es la información de mis fuentes de trabajo. Yo he ido a declarar a la fiscalía por este mismo tema, me están investigando hace meses.
—¿Desde hace cuántos meses?
Hace un año. Me reglaron y no encontraron absolutamente nada y lo archivaron. ¿Ahora me allanan? Este allanamiento ha sido absolutamente irracional, abusivo, injustificado. Yo pido una aclaración: ¿de qué delito se me acusa? Y, por supuesto, mencionan que mi reportaje de Sada Goray y el viaje de los fiscales a Punta Cana y demás son difamatorios. ¿En qué extremo? ¿Por qué los fiscales Barreto y Niño no me hicieron un juicio por difamación? ¿Por qué nunca me enviaron una carta notarial?
— Has reconocido que conoces a Mirtha González Yep, la empresaria que -según documento fiscal- ‘aceitó’ a los asesores de Benavides para lograr cambios de fiscales que favorecieran a su pareja Castillo Alva.
Sí, a Mirtha González la conozco desde el 2010. Ella iba a ser socia de “Diario 16″ y a última hora dio marcha atrás. Es una empresaria constructora dedicada al rubro inmobiliario.
— Y fue la colaboradora eficaz en el caso de Héctor Becerril y los porcelanatos.
Exactamente.
— ¿Sabes que ella está en serios problemas, porque se supone que un colaborador eficaz no puede incurrir en delito por 10 años?
Las imputaciones que le están haciendo son serísimas. Lo lamento por ella porque es mi amiga y no puedo negar mi amistad. Pero, al mismo tiempo digo que cada quien asume la consecuencia de sus actos. Jaime Villanueva también era amigo mío. Él era colaborador de Exitosa, del diario “Exitosa” y, luego, fue colaborador de Sudaca.
— La conoces de la época del “Diario 16″. ¿Entonces Mirtha ya era pareja de José Luis Castillo Alva?
Yo me he venido a enterar el día de mi allanamiento. No tenía la menor idea de que tenían una relación sentimental. Primera noticia.
— El punto es que ella pedía cosas ilícitas en fiscalía a favor de su pareja…
En todas las reuniones en las que he participado, en ninguna se ha mencionado pagos a fiscales o funcionarios de la fiscalía, intercambio de favores o destitución de fiscales o jueces, o beneficios para Castillo Alva. Jamás. La segunda reunión, que tuvimos con Patricia Benavides, fue por solicitud de Jaime Villanueva quien quería conocer gente que estuviera interesada en sacar medios. Y esa es la razón por la cual yo llevo a Mirtha González, porque estábamos preparando un semanario que después se frustró. Villanueva estaba obsesionado con los medios, decía que había una orquestación mediática en contra de Patricia Benavides y necesitaba tener contrapeso.
— El expediente fiscal asegura que González Yep te llama para que contactes a Villanueva porque quiere reunirse con la fiscal y ofrecerle una persona que la ayude en el caso Cuellos Blanco, que resulta ser el policía.
Jaime Villanueva me llama para preguntarme sobre personas que estén a punto de sacar un medio de comunicación. Por eso la llevo.
— ¿De dónde sale que Mirtha quiere conocer a la fiscal porque quiere presentarle una persona que le ayude?
No lo sé. Eso lo habrá dicho alguno de los colaboradores eficaces. Pero yo lo niego. No se habló nunca de un policía que pudiera ayudarla en las investigaciones preliminares de la junta. Yo sí estoy convencido de que los fiscales inducen a los colaboradores eficaces a decir lo que ellos quieren que digan. Marita Barreto no me quiere nada. Me aborrece.
— En la segunda reunión del 13 de marzo del 2023 se reúnen Patricia Benavides, Miguel Girao, Juan Carlos Tafur y Mirtha Gonzales Yep en el despacho de la fiscal de la Nación…
Esto es falso. Yo nunca me he reunido con Miguel Girao; ni lo conozco. Yo recién le he visto en los videos de detención preliminar.
— ¿En algún momento te has reunido con Girao?
Nunca, no lo conozco. Sí reconozco que reunirme con la fiscal Benavides y Villanueva para hablar sobre los medios fue un error, porque esa no es labor periodística. Lo reconozco.
— ¿Te arrepientes?
Sí. Y no me estoy lavando las manos. Yo no he debido ser partícipe de esas reuniones. Ni siquiera a pesar de que no hay delito. No es debido y me sirve de lección. Me basé en mi amistad con Jaime Villanueva, que era amigo mío, igual que Mirtha González, y me confié en eso para sostener una reunión entre ellos. He pecado de tonto, pero no soy delincuente. Él quería conocer cómo funcionaban los medios, cuánto costaba, etcétera. Quería ver la manera de armar una red de medios que pudiese servirle a él como contrapeso a lo que él consideraba una conspiración mediática en contra de Patricia Benavides.
— ¿Y Mirtha qué vela tenía en ese entierro?
Era una potencial financista de un probable medio.
— ¿Mirtha González Yep le propuso ayuda a Benavides porque ella conocía un efectivo policial que había hecho el informe de vinculación y registro de llamadas del caso Cuellos Blancos del Puerto?
Nunca se habló de eso en mi presencia. Lo digo con absoluta seguridad. En la tercera reunión sí estuvo este oficial Rodríguez Menacho, que era una de mis fuentes. Él era miembro de la Diviac, pero Colchado lo sacó. La fiscal Benavides sostenía que no era cierto que hubiera hablado con Antonio Camayo y yo dije que tenía una persona que podía desmentir esa información y era Rodríguez Menacho. En esa reunión él le dijo: doctora, usted está equivocada.
— ¿Para desmentir se reúnen Patricia Benavides, Rodríguez Menacho, Villanueva, Mirtha González y tú?
Los cinco. Y en su cara pelada le dice que está equivocada: “No siga diciendo eso porque es mentira. Esas llamadas existen”. A partir de eso le digo al policía que quiero publicar un informe, pero no tenía el registro de las llamadas. Por alguna razón desaparecieron y él lo sabía porque hizo el informe de vinculación y registro de llamadas del Caso Cuellos Blancos.
— ¿Qué dijo ella?
Se mostraba desconcertada y no daba su brazo a torcer, decía que no era cierto.
— ¿Por qué propiciaste esa reunión?
Entonces ya se conocían varias de las denuncias en contra de la fiscal Patricia Benavides: el tema de su hermana, lo de las tesis falsas. De los temas que aparecieron eran las llamadas con Camayo en el Caso Cuellos Blancos. Llamo a Villanueva y le digo que hay una persona que tiene información que es pertinente para el caso y que es importante que la fiscal lo escuche para que no diga las tonterías que está diciendo.
— ¿Por qué querías decirle eso a la fiscal?
Porque quería que aclare el tema.
— ¿Y por qué llevas a Mirtha González?
Quien me presenta a Rodríguez Menacho es Mirtha González.
— Pero no dices que él era tu fuente…
Sí, hace mucho tiempo me lo presenta.
— ¿Por qué tenías que llevarla a esa reunión?
Porque… en fin… quería ir… quería ser parte… Lo que sí aclaro es que ella no participó en esa conversación. La discusión fue entre Rodríguez Menacho, Benavides y Villanueva. González Yep y yo fuimos testigos silentes porque no teníamos idea de lo que estaban conversando entre ellos.
— ¿Volviste a tener contacto alguno con la fiscal Benavides?
Nunca más.
— ¿En algún momento has recibido dinero de Mirtha para abrirle la puerta de la fiscalía?
No, lo niego rotundamente.
— ¿Te ofreció algo a cambio de que le presentes a la Fiscal de la Nación?
Nada.
— Quien necesitaba beneficios de la fiscal Benavides era Mirtha González, pues era pareja del procesado Castillo Alva y tú la llevas a una reunión con la fiscal…
Eso yo me he venido a enterar después. Si ella utilizó después ese contacto para sus propios fines, escapa a mi conocimiento.
— En esas reuniones se discutía cambiar a los fiscales de Cuello Blanco para beneficiar a Castillo Alva…
Si yo fuera un operador, si fuera parte de la organización criminal que operaba en esos términos, hubiera participado de esas reuniones. No aparezco en ninguna. Ni en la de los pagos de dinero, ni en la de los cambios de fiscales, en absolutamente ninguna. En el expediente dicen, además, que yo publico un artículo difamatorio en su contra. ¿No era absolutamente cierto que su exadjunto se había convertido en abogado de Sada Goray? ¿No es verdad que ella viajó a Punta Cana a entrevistarla cuando era cabecilla de una organización criminal y no merecía ese trato privilegiado? ¿En dónde está la difamación? A partir de que yo publico esa información, el caso resucita. Fueron dos artículos que yo publico sobre el tema y se reconduce luego penalmente y culmina en la prisión de Sada Goray.
— En una segunda reunión, en Barranco, están tú, González y Villanueva, y que en un momento este sale de la cafetería y ahí Mirtha le dice que puede coordinar e influir sobre este efectivo policial.
Yo no fui testigo de eso. No he escuchado absolutamente nada de ese tema.
— ¿Salió Jaime Villanueva a hablar con Mirtha González Yep?
Mira, si han salido ha sido después de que yo me fui. A mí no me han dejado solo tomando un café.
— ¿Mirtha no te contó lo que estaba haciendo con la fiscal?
Nunca me mencionó el tema.
— La conoces desde el 2010. ¿La consideras tu amiga?
Es mi amiga, sí.
— ¿Cómo entender que era tu amiga y que no sabías que era pareja de Castillo Alva?
No lo sabía. Es más yo pensé que tenía otra identidad sexual. Es la verdad de la milanesa, con el perdón del término. La vi siempre sola. No le conocí pareja.
— La tercera reunión es en el Westin. González Yep le reitera al ex asesor Villanueva que necesitan que beneficien a su pareja sentimental, Castillo Alva. Y otra vez ella explica que si le otorgaban el beneficio ilícito, ella influiría sobre Jorge Jonathan Rodríguez Menacho.
En un momento me paré y me fui. Yo no sé si ellos se habrán quedado hablando de ese tema. Ya escapa a mi conocimiento.
— Has dicho que todos los fiscales supremos deben irse y también los del equipo Lava Jato…
Porque se han excedido sus atribuciones, tienen a centenares de personas involucradas en casos que ya el juez San Martín ha dicho que se van a caer. Ha comentado que no hay lavado de activos en la entrega de donativos de campaña. Entonces, se cae el caso de Ollanta, el de Keiko. Los fiscales de Lava Jato han demostrado ser ídolos de barro y el manejo del Caso Odebrecht ha sido penoso.
— ¿Por qué los periodistas no han salido como resortes a defenderte?
Lamentablemente hay una ideologización por mi apoyo a Benavides. Me han sacado la mugre en las redes sociales. Unos consideran que soy un periodista de derecha, otros que soy caviar. ¿Por dónde? Yo me considero un derechista liberal, toda mi vida.
— Cuando yo leo lo que dicen sobre Gorriti, que es mucho más grave…
Es mucho más grave.
— Villanueva no solo dice que fue parte de la estrategia del cerco político a Alan García, sino que era un operador dentro de la fiscalía y que trabajaba con Pablo Sánchez. ¿Merece un allanamiento?
Me parece muy grave todo lo que dicen de él, pero en general no deberían producirse allanamientos a los periodistas.
— Un periodista que se convierte en operador deja de ser periodista.
Gorriti ha excedido sus atribuciones periodísticas hace mucho tiempo. Al margen de lo que cuente Villanueva, él se excedió y lo he publicado en Sudaca. Pero también el poder del Ministerio Público es excesivo. Hoy el fiscal es el todopoderoso. Mancha honras, enloda gente, mete a prisión a gente. ¿Quién le va a pagar las tres prisiones a Keiko Fujimori si mañana sale libre? ¿Vela Barba? ¿Él se va a comer los años de cárcel que ella vivió? ¿O será el juez Carhuancho?
— Después de leer el expediente ¿defiendes a Umberto Jara?
Él hace tiempo no es periodista, es lobbista. Es un lobbista conocido. Entonces, si ha hecho un cobro por un lobby, es su problema.
— ¿Crees que desde la fiscalía se cercó con premeditación a García?
Yo sí creo que Alan García fue víctima de un operativo judicial y fiscal para involucrarlo en imputaciones penales que no tenían ningún sustento ni fundamento. Y me peleo con algunos amigos míos, como Pedro Cateriano que me dice cómo puedo pensar así. Muéstrame pruebas, porque las de Nava y Atala no me merecen credibilidad.
— Eres de los que piensa que Boluarte no debe llegar al 2026…
Cada día que pasa Dina Boluarte en el poder son 5.000 votos más para Antauro. Es un desastre su gobierno, absolutamente mediocre.