Jaime Spak
Para Lampadia
No me considero machista, por muchos motivos.
Primero por el respeto que siempre les he tenido a las mujeres, segundo porque me crié en un hogar, en donde a la ausencia temprana por fallecimiento de mi padre, viví con mi madre y mis tres hermanas.
Fui testigo de excepción como mi hermana mayor a sus pocos años adolescentes tuvo que hacerse cargo de la familia en base a trabajo y organización.
Incluso ella enviudó muy joven y vi el esfuerzo por sacar adelante a su propia familia.
En el colegio mixto donde estudie también eran las mujeres las que destacaban e incluso una de ellas fue la medalla de oro de excelencia en la promoción.
En estos momentos tan complicados no solo en el Perú, sino en el mundo podemos ver cómo las mujeres lideran grandes empresas multinacionales o están en la política en puestos de mucha importancia:
- Presidenta de PepsiCo.
- Ministra de Finanzas de Francia
- Presidenta de Kraft Foods
- Ex Canciller de Alemania por muchos años.
- Primera Ministra de Nueva Zelanda
- Bioquímica húngara responsable del éxito de vacuna para el Covid.
- Vicepresidenta de USA
- Presidenta del Banco Central Europeo.
- Primera Ministra de Gran Bretaña
Solo he puesto un pequeño grupo de mujeres que lideran tanto en el ámbito privado como público.
En nuestro país las mujeres policías gozan de mucho mayor prestigio que los policías masculinos.
Hace poco estuvieron mujeres peruanas liderando el poder judicial, el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo, el Congreso, el Tribunal Constitucional, el Ministerio de Defensa, el consejo de ministros del anterior gobierno, la Bolsa de valores de Lima, la Sociedad Nacional de Pesquería entre otras instituciones.
Creo que las únicas excepciones serían la vicepresidenta de la República que no tiene el coraje ni la capacidad de deslindar con el presidente y la ex fiscal de la Nación Zoraida Avalos que se coludió con Vizcarra y que archivo hasta nuevo aviso las investigaciones a Castillo.
Pero definitivamente estas son la minoría.
Cuando hablamos de calidad y honestidad, las mujeres llevan una enorme ventaja a los hombres.
El caso de la Fiscal de la Nación, Patricia Benavides, es un caso digno de resaltar.
Ha logrado lo que los otros fiscales no pudieron, es decir abrir investigaciones al presidente de la república y nombrar a la fiscal Marita Barreto para que sea la líder del grupo de fiscales y policías que se están enfrentado a la mafia que está enquistada en el gobierno.
Vemos con estupor como el presidente y sus abogados hacen todo lo posible por dar de baja al coronel Colchado, jefe del grupo de policías que está, trabajando junto a la fiscal Barreto y está liderando el grupo de oficiales encargado de las investigaciones y captura de las personas más cercanas del presidente Castillo.
Los peruanos pasamos por agua tibia, situaciones como el sobrino del presidente que está prófugo hace más de seis meses, protegido por su tío y es posible que a estas alturas este muchacho se haya fugado a algún país vecino, gozando del apoyo del gobierno.
Seria espectacular que el grupo de policías pueda lograr la captura del exministro Silva, pues no hay duda que con ello se lograría desenmarañar toda la corruptela que se tejió en el Ministerio de Transporte y Comunicaciones, apenas comenzó el gobierno corrupto de Castillo.
No me sorprendería que esta semana que deben censurar al ministro Genier Alvarado, sea uno más que pase a la clandestinidad.
Espero que la policía lo tenga bien controlado, pues sino será uno más de los fugados.
Por ello regresamos a la pregunta de este artículo: ¿solo las mujeres podrán salvar al Perú?
Estoy seguro que si logramos que dentro de las múltiples mujeres que están en la política o que desean ingresar a ella para poder ser una alternativa de gobierno serio, decente y responsable, tendríamos una luz muy brillante al final del túnel.
Está comprobado que las mujeres son más eficientes que nosotros los hombres, son más honestas y sobre todo más trabajadoras.
Solo basta ver a las maravillosas mujeres que siendo madres solteras tienen que sacar solitariamente a su familia, a las madres que son las líderes de las ollas comunes que ayudan a tantos hogares que pasan enormes problemas para llevar alimento a sus familias, la gran cantidad de mujeres emprendedoras que hoy en día son un ejemplo para todos nosotros.
Por ello no me cabe la menor duda que apenas caiga este gobierno que ha engañado a los peruanos, sería maravilloso que una mujer pueda ser la que tome las riendas del país.
Tengo que hacer hincapié que no desearía que sea ninguna de las que anteriormente han intentado llegar al poder sin éxito o de otras mujeres que por un suculento sueldo deciden dirigir instituciones de gente cuestionada.
Estoy hablando de gente nueva.
Sobre todo, ahora que volvemos a tener que lidiar con visiones de extremismo como el débil mental de Antauro Humala, que con su tesis fascista de que solo la raza cobriza salvará al Perú o que hay que fusilar a todos los que han delinquido, pretende ganar adeptos dentro de las poblaciones más vulnerables.
Los peruanos no nos merecemos más de lo mismo, necesitamos alguien que nos represente y que sobre todo predique con el ejemplo, que una mujer de armas tomar como las fiscales o como tantas mujeres que he mencionado anteriormente puedan de una vez por todas asumir ese compromiso para salir de esta pesadilla que tanto daño está haciendo al Perú.
Hace unos años había un lema que decía “Solo el Apra Salvará al Perú “.
Pues ahora yo diría que solo las mujeres salvarán al Perú, con coraje, inteligencia, honestidad y dedicación. Lampadia