Carlos E. Gálvez Pinillos
Expresidente de la SNMPE
Para Lampadia
El 30 de agosto de 2022, falleció Mijail Gorbachov a la edad de 91 años (nació el 2 de mayo de 1931), un personaje de la historia universal contemporánea, que dejó grandes lecciones al mundo y que debiéramos tener presente en el Perú.
Gorbachov, proveniente de una familia campesina, estudió inicialmente derecho en la Universidad de Moscú, para posteriormente, en la década de los 60s, estudiar agronomía, profesión que le resultó fundamental y brindó un gran éxito político afrontando la sequía que se dio en 1968. Este éxito frente a la sequía, lo hizo saltar a la política y le permitió una muy rápida y ascendente carrera en ese campo. Fue designado primero como miembro del Sóviet Supremo en 1970, para luego ser incorporado al Comité Central del Partido Comunista en 1971 y más adelante, en 1978, ser nombrado Secretario de Agricultura y del Politburó en 1980. Debemos recordar que, en 1980 la URSS sufría desabastecimiento, mortalidad infantil, espíritu totalitario, control político centralizado y un Estado policiaco.
Sucedió a Konstantin Chernenko como Secretario General del Partido Comunista Soviético, en circunstancias en que la URSS (Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas) empezaba a declinar en términos sociales, políticos y económicos. En 1988, a los 57 años, fue nombrado presidente del Soviet Supremo y asumió como el último Presidente de la Unión Soviética. Este nombramiento significó no sólo el inicio de un cambio generacional, sino una gran esperanza de renovación política, que impulsaba una corriente reformista para sacar a la URSS del estancamiento económico, político y cultural alcanzado en la época de Brezhnev.
Su primera preocupación fue la apertura de la URSS al mundo exterior, la renovación del sistema económico soviético, dando los primeros pasos hacia una economía de mercado. Impulsó el “Uskoréniye” (aceleración), el “Glasnot” (apertura y transparencia) y la “Perestroika” (reestructuración y reconstrucción económica), permitiendo economía de mercado, más emprendimiento, más democracia, más organización y disciplina, e impulso al desarrollo de un nuevo espíritu socialista. En esa línea, priorizó:
- Descentralizar el sistema político.
- Desmontar el Estado policiaco vigente.
- Incrementar radicalmente la lucha contra la corrupción.
- Modernizar la industria.
- Liberalizar la economía.
- Privatizar empresas y liberalizar los precios.
- Poner fin a la regulación de salarios.
- Fin al control completo de la economía por parte del Estado.
Obviamente, proponiéndose estos objetivos, Gorbachov demostró ser un líder de mente abierta, no obstante haber sido formado en el pensamiento y doctrina del partido comunista.
Lamentablemente, el plan liberal y descentralizado no resultó como lo había planeado, pues la URSS y sus ciudadanos no estaban preparados para el cambio, además de encontrarse con gran resistencia de la cúpula del partido comunista y como consecuencia, se inició el derrumbe de la URSS, fragmentándose en 15 estados, seguido de una grave crisis económica.
No obstante, en lo que a política internacional se refiere, Gorbachov fue un líder internacional que
trajo como consecuencia el fin de la guerra fría,
promovió y suscribió un acuerdo de desarme nuclear con Ronald Regan (USA),
generó las condiciones para la caída del Muro de Berlín y
promovió la reunificación de Alemania.
Todos estos logros le valieron el Premio Nobel de la Paz en 1990.
Fue un honor y una oportunidad extraordinaria, haber podido tener en nuestro Sexto Symposium Internacional del Oro de la Sociedad de Minería, Petróleo y Energía, en el año 2004, al Presidente Gorbachov y poder escuchar directamente su pensamiento, experiencias y mensajes al Perú. Me cupo la oportunidad de propiciar su venida y participación, en mi condición de Presidente del Comité Organizador del Symposium, así como el privilegio de ser su anfitrión y poder conversar con él durante su estadía en el Perú.
Cuán vigentes siguen sus ideas y recomendaciones de ese entonces, qué importante su mirada pragmática y enfoque al mercado, al estímulo a la actividad empresarial, a la liberalización de los precios, a la liberalización de los salarios y el impulso a la creatividad e iniciativa empresarial.
Qué clara es la diferencia entre un estadista bien formado académicamente, con experiencia de liderazgo y conducción de un país tan grande como la URSS, conocedor del mundo y con una justa preocupación por su pueblo, contra la vergonzante mirada de unos políticos criollos de izquierda, corruptos y legos en el manejo de la cosa política, social y económica.
Descanse en Paz Presidente Gorbachov y ojalá la izquierda peruana aprenda algo de su legado. Lampadia