Entrevista Antonio Escribano, Nutricionista de la Federación Española de Fútbol
Por Renzo Giner Vásquez
El Comercio, 07 de diciembre de 2017
Todo lo que los seleccionados de fútbol españoles han comido en la última década ha tenido que ser preaprobado por el doctor Escribano. El especialista en medicina deportiva estuvo en Lima para dictar un seminario de nutrición en el fútbol organizado por la Federación Peruana de Fútbol y la USIL.
—¿Por qué es importante lo que come un atleta?
Primero, es el vehículo donde se aportan los nutrientes. Segundo, es definitivo al momento de la composición corporal, concepto que va más allá del peso; nosotros medimos todo. Tercero, la alimentación es el combustible. Para un atleta de alto nivel, la alimentación no solo es importante, es decisiva.
—Antes un futbolista podía tomar una Coca-Cola antes de salir a jugar, ahora debe ser impensable…
Bueno, por una Coca-Cola no pasa nada, siempre y cuando sea una hora u hora y media antes de jugar. Inmediatamente antes no porque podría generar una hipoglucemia reactiva [reducción de los niveles de glucosa].
—¿Qué come un futbolista de élite, por ejemplo?
Bueno, lo que yo hago es organizar toda la secuencia de alimentación en las concentraciones. Eso incluye lo que se come el día anterior al partido, antes de jugar y la recuperación. De estas, la más importante es la comida de la noche anterior al partido.
—¿Qué se come ahí?
Un 50% o 60% de carbohidratos, 20% o 22% de grasas y un 10% o 12% de proteí- nas. Esto lo llevamos con papas, pastas, arroz, ensaladas y la proteína me da igual si es carne o pescado.
— ¿Y antes de jugar?
Unas cuatro horas antes les damos algo de carbohidratos, ensaladas, pescados o carne. Muy ligero todo. Casi nada de grasa. De postre pueden tener un zumo de naranja y plátanos aplastados. Lo importante es que mastiquen cada bocado más de 25 veces, si no es así termina el partido y la comida sigue ahí.
—Finalmente, ¿después?
A veces hamburguesas.
—¡Hamburguesas!
Pero hechas por nosotros. ¿Qué de malo tiene un pedazo de carne, vegetales y dos rodajas de pan? Una ensalada puede tener chorizo, tocino y mayonesa. El concepto no define a la comida, los componentes sí.
—Me contó que medían todos los índices de los atletas. ¿Como cuáles?
Cuánto miden, cuánto pesan, cuántas calorías gastan, sabemos cuál es el metabolismo de cada uno, cuánto corren. Y son muchos datos, en España se juegan 25 mil partidos de fútbol federados cada fin de semana, tenemos un millón cien mil fichas [de jugadores]. De ese millón muy pocos jugarán la Champions League, pero todos se beneficiarán de una vida más saludable gracias al fútbol.
—¿Cuántas calorías se queman en un partido?
Entre 1.200 y 1.500.
—Deben bajar mucho de peso…
No deberían, eso implicaría haberse deshidratado. Si el futbolista pierde 3 kilos después de un partido es porque lo ha hecho mal. Debe salir pesando igual, con pequeñas variaciones quizás. Luego, la recuperación es metabólica, de carbohidratos.
—Como los videos de Michael Phelps devorando cerros de comida.
Sí, pero creo que eso fue márketing. Decían que comía 18 mil calorías, es como si un carro gastara 150 litros de gasolina en 10 metros. En la nutrición hay mucho mito, leyenda, negocio y muy poco sentido común. Yo me paso la vida desmintiendo tonterías que la gente se inventa sobre la nutrición.
—¿Como cuál?
Como que hay que consumir proteínas después del esfuerzo. El cuerpo no gasta proteínas, hay que tomar carbohidratos y acompañarlas con un poco de proteínas que vienen en la comida, no en latas. Para qué vas a tomarte un polvo si un filete tiene un 25% de proteínas.
—Su mente debe estar en todo lo que harán en Rusia.
Ya lo tenemos todo muy rodado. Hace nada planifiqué el Mundial Sub 17 en la India, luego la Sub 21, no hay año que se nos escape un mundial. La verdad es que ni siquiera hemos pensado en Rusia, faltando unos 3 o 4 meses lo veremos.