Por: José Luis Gil
Perú21, 16 de junio del 2022
“El principal error ha sido permitir que el Sistema de Inteligencia policial esté dirigido por un general PNP sin trayectoria, conocimientos ni preparación para esta rama especializada”.
El revuelo causado por la “fuga” del exministro del MTC Juan Silva Villegas debe ser analizado con más profundidad y desde tres ámbitos concretos: En primer lugar, el ámbito político, debido a que han surgido voces ciudadanas sobre una injerencia política para adormecer las acciones de la Inteligencia y así evitar (o frustrar) la captura tanto de Silva como de Bruno Pacheco y otros involucrados en la red de corrupción del gobierno de Pedro Castillo. Esperamos que los agentes de Inteligencia patriotas no se presten a este juego sucio y los capturen con prontitud. Hay mucho en juego, como el futuro.
El difícil reto del ministro del Interior, Dimitri Senmache, en el campo político, será poner en práctica su muñeca política y una buena dosis de humildad para capear el mal humor político que ha producido su desenfreno, altanería y cero tolerancia al escrutinio congresal y de los medios de comunicación. Debería pensar más bien en privilegiar la institucionalidad y estabilidad policial antes que su temperamento. Un consejo hasta de un delfín.
En segundo lugar, en el ámbito policial, el principal error ha sido permitir que el Sistema de Inteligencia policial esté dirigido por un general PNP sin trayectoria, conocimientos ni preparación para esta rama especializada. No cuestionamos aquí sus capacidades o cualidades profesionales en otras materias, ni se plantean hipótesis de corrupción, sino la idoneidad para el puesto. ¿Por qué no se han usado esas habilidades y capacidades de un experto como el general PNP Luis Flores Solís, ex-GEIN, exdirector de Inteligencia Digimin? Esperamos respuestas.
En el ámbito de la Inteligencia Mininter, se presenta la misma falencia que en el sistema de Inteligencia policial: la incapacidad y falta de profesionalismo. Por eso, no es válido argumentar que no se actuó por falta de mandato judicial, porque se colisiona con la doctrina de Inteligencia que ya considera hacer inteligencia predictiva, realizar acciones indagatorias, recolectar y sistematizar las informaciones de los blancos, y estar preparados en cuanto la medida limitativa de derechos emane del Poder Judicial, como siempre se ha hecho.
Sobre la “videovigilancia o seguimiento” dispuestos por la Fiscalía, son parte de los instrumentos de la Inteligencia policial operativa como son la Observación, Vigilancia y Seguimiento u OVISE, que no son exclusivos ni excluyentes, forman parte de la doctrina policial, están plasmadas en instrumentos jurídicos y pertenecen a la práctica diaria de los operadores de inteligencia. Recuerden, valerosos y patriotas hombres de Inteligencia, la siguiente frase: “La Inteligencia solo sirve a los más altos intereses del Estado y la Nación peruana, no sirve para los intereses particulares del gobierno de turno”. ¡Hagamos patria capturando a los facinerosos y recuperemos la confianza ciudadana! Sí se puede!