Fast Track
Por Leopoldo Monzón Ugarriza
CEO PROESMIN SAC
Para Lampadia
Desde el cambio de gobierno en julio de este año, la minería peruana viene padeciendo el acometimiento de los pobladores aledaños a operaciones mineras. Esta situación ha sido generada por el desentendimiento de sus reclamos a lo largo de los años por los diferentes gobiernos de turno, con el agregado de que los azuzadores del ayer son hoy representantes ministeriales. ¿El resultado? Situaciones de tensión, amenazas, conflictos y enfrentamientos violentos.
Un claro de ejemplo de lo mencionado son las paralizaciones de las unidades mineras de Antamina, Breapampa, Apumayo, Inmaculada, Bambas y Nexa. Estas seis mineras representan más de US$ 15 millones de dólares diarios de utilidad en el mercado nacional; del cual el Estado Peruano se ve perjudicado con más de US$ 6 millones de dólares diarios por el detenimiento de sus operaciones.
Luego de una exhaustiva revisión de las unidades mineras y aquellas que se encuentran paralizadas, consideramos que las comunidades aledañas a la actividad minera presentan un patrón: falta de empleo local, poca inversión en implementación y mejora de servicios básicos como agua, desagüe, energía, seguridad vial, puestos de salud, conectividad e instituciones educativas. Estas brechas pueden resolverse a través de medidas estratégicas y adecuadas (sin la necesidad de cobrar mayores impuestos) en base a cada realidad territorial que enumeraremos a continuación:
Mapa 1: Ubicación de Proyectos aledaños a zonas mineras en el sur del Perú
Medidas Propuestas: Inversión con nuevas reglas de juego
- Realizar un Fast Track bajo la modalidad de Obras por Impuestos (OXI) en las cuencas hidrográficas en donde se explotan los recursos naturales no renovables. Para ello, los recursos económicos necesarios vendrán de dos fuentes: la primera corresponde a los montos presupuestados en el 2021 en los tres niveles de gobierno que no se utilicen en las áreas de influencia directa e indirecta de las minas; la segunda corresponde al monto del canon del año 2021, que será mucho mayor a los años anteriores, producto de los precios actuales internacionales de los metales. Todo ello será parte de un fondo que estará relacionado con un fidecomiso que garantizará el desarrollo de proyectos que tengan el consenso de la población, Estado y empresas mineras.
- Implementación de una norma de adquisición, que facilite la adquisición de maquinarias e insumos bajo la modalidad OXI. Se podrá transferir recursos a las comunidades para el desarrollo de actividades sostenibles como la agricultura, ganadería, cosecha y siembra de agua y, mejora o desarrollo de la infraestructura existente.
- Mayor responsabilidad empresarial minera a través de programas de apoyo técnico para la priorización de necesidades básicas, planificación e ingeniería de proyectos sostenibles en conjunto con las comunidades. Mediante una declaración jurada y cronogramas pactados por las partes interesadas (empresas-comunidades), se elaborarán programas de actividades para la ejecución de obras bajo la modalidad de Obras por Impuestos, sin tener que pasar por el programa de Invierte.pe. Supervisar y verificar las obras para evitar la superposición de las mismas.
- Las empresas seleccionadas para la implementación de las obras deben estar comprometidas en capacitar y contratar a la población local y, a las empresas comunales, en caso que estas existieran.
- Una vez concluida la obra, mientras está se encuentre en pleno funcionamiento y cuente con un Plan de Operaciones y Mantenimiento, el fondo receptor del canon emite el CIPRL correspondiente.
Lo expuesto, traería como resultado más 120,000 nuevos empleos directos en agricultura, ganadería, comercio y servicios bajo una visión de desarrollo sostenible para el país. Lampadia