Entrevista a Ricardo Lerner
Por Raúl Castro Pereya
(Gestión, 24 de julio de 2015)
La oficina de Roberto Lerner es también una biblioteca. “He perdido libros como para llenar dos bibliotecas”, señala. “Pero tampoco ya tengo espacio para más”, agrega y posa para las fotos.
El psicólogo se sienta en su sillón, pero hecha al Perú en un diván. Las fiestas patrias son una buena excusa para hacer una pausa y reflexionar.
Lerner respira y recuerda que hace tres años estuvo en un CADE universitario. “Cuando les preguntaron a los estudiantes sobre las virtudes que más han practicado, respondieron: iniciativa, creatividad, emprendimiento; y las que me menos ensayaron: respeto por las reglas, patriotismo y alegrarse por el éxito de otros”.
¿Qué lectura le da a esas respuestas?
Creo que detallaron algunas de las características de los peruanos. Somos muy buenos en todo aquello que tiene que ver con el individuo, con el yo.
¿Qué pasa con lo colectivo?
Nos es muy difícil hablar en la primera persona del plural, no hablamos de nosotros. Quizá, por eso es tan difícil que podamos armar una buena selección de fútbol por ejemplo, tenemos problemas para armar equipos. Hay mucho resentimiento y mucha desconfianza en general.
¿No solo en política?
En todas las instituciones y situaciones. La gente desconfía de alguien que dice: yo quiero…
¿Hay un exceso del yo?
Hay un desprecio por lo que es de todos y se trata como propio. Esto es una característica de todas las clases. La gente dice sobre un mismo parque: como no es mío me orino en él o es mío y me apropio con una reja de una parte como ha pasado en El Olivar.
Su visión es negativa…
No, porque por otra parte el peruano es absolutamente creativo y hay una sofisticación interesante que se expresa en la comida y en ciertas manifestaciones de arte. Cada vez siento que hay más identificación con elementos culturales.
¿Ve alegría en los peruanos?
A pesar de que somos los últimos en el ranking de felicidad en Latinoamérica, hemos avanzado mucho a nivel mundial. Percibo que la gente tiene menos miedo del futuro, a pesar de todo.
¿Y cómo se expresa ese no temor?
Cuando la gente tiene menos miedo del futuro, tiene más hijos, muestra más el cuerpo, compra más, se ven edificios más altos. Soy optimista, pero no veo a las instituciones acompañen el cambio. Hay, sin embargo, una conducta muy bipolar, muy de péndulo entre los peruanos.
¿A qué se refiere?
Gana la selección y somos campeones mundiales, pierde y ya queremos despedir al técnico.
¿En política también estamos siempre en un péndulo?
Allí somos muy moderados. Si se analizan las elecciones en los últimos 35 años, verá que siempre ganó el que daba menos miedo, incluso en la última. No importa si es de derecha o de izquierda, tampoco la cuestión económica.