En Lampadia venimos insistiendo en la necesidad de hacer una revolución educativa que nos permita una transformación acelerada la calidad de la enseñanza.
En las últimas semanas hemos presentado:
- La diferencia entre la visión conservadora del Ministerio de Educación versus el análisis de Lant Pritchett, de Harvard, que nos demuestra que en las pruebas Pisa estamos a 100 puntos del promedio de los países de la OCDE y que avanzamos solo un punto por año. (La educación está en crisis y nosotros estamos de fiesta).
- El enfoque innovador de escuelas creativas de Ken Robinson. (¿Las escuelas matan la creatividad?).
- La entrevista de Jaime de Althaus a Gonzalo Galdos, Director de Futura Schools, que nos muestra el sesgo anti inversión privada del ministerio del sector. (Hay un sesgo ideológico en contra del sector privado).
- La entrevista de Jaime de Althaus a León Trahtemberg, experto peruano en educación, que nos habló de la necesidad de cambiar el enfoque educativo hacia el aprendizaje a través de proyectos integradores en vez de estructuras curriculares de siglos atrás. (Necesitamos un sistema educativo para el siglo XXI).
En nuestros análisis hemos enfatizado que en un país con las deficiencias educativas que tenemos no se puede seguir despreciando el aporte de la educación privada a la mejora de la enseñanza, como hacen el ministro y su sector. La educación privada aporta una inversión del 3% del PBI y está generando experiencias exitosas, muchas de ellas dirigidas a alumnos de familias de ingresos reducidos, como son los casos de Fe y Alegría, Innova Schools y Futura Schools. Además de los desarrollos innovadores y pioneros de centros educativos como el Colegio Áleph, liderado por León Trahtemberg.
Muchas de estas experiencias están creando estrategias y procesos educativos que debieran ser alentados por el Estado y, evaluados de cerca para aprovechar las técnicas que puedan adaptarse y escalarse a nivel nacional en la educación pública.
Como siempre, muchos descuentan esa posibilidad porque sería muy costosa, difícil de lograr con el sindicato único o, imposible por la preparación de los maestros. Sin embargo, todos estos desarrollos educativos contratan a los mismos maestros que trabajan el los colegios públicos. En esencia lo que hacen es inspirarlos, capacitarlos y motivarlos. Nuestra gente puede haber recibido una educación de mala calidad, pero hay muchas experiencias en educación y salud, que demuestran que los peruanos tienen condiciones naturales que les permiten transformarse positivamente con capacitación y ambientes aleccionadores.
Líneas abajo compartimos el video (y su trascripción en español) de TedTalk, en el que Seema Bansal relata la transformación acelerada de la calidad educativa del estado Haryana de India, que tiene la misma población del Perú. Transformación lograda con elementos al alcance de todos y sin recurrir a grandes inversiones. El siguiente cuadro presenta las cifras de Haryana y el Perú.
Veamos la presentación de Seema Bansal:
Video emitido en TedTalk
Mayo 2016
Transcrito en inglés por TedTalk
Traducido y glosado por Lampadia
0:11 Así que todos tenemos nuestros propios prejuicios. Por ejemplo, algunos de nosotros tendemos a pensar que es muy difícil transformar los sistemas de gobierno fallidos. Cuando pensamos en los sistemas de gobierno, se tiende a pensar que son arcaicos, pegados a sus costumbres y que, tal vez, el sistema de liderazgo es demasiado burocrático como para poder cambiar las cosas. Pues bien, hoy quiero desafiar esa teoría. Quiero contarles una historia de un sistema de gobierno muy grande que no sólo está en camino a reformarse, sino que también ha mostrado resultados bastante espectaculares en menos de tres años.
0:47 Así es como se ve un salón de clases en una escuela pública en la India. Hay 1 millón de escuelas de este tipo en la India. Incluso para mí, que he vivido toda mi vida en la India, es muy doloroso entrar a una de estas escuelas. Cuando los niños tienen 11 años, el 50% de ellos están tan atrasados en su educación que no hay ninguna esperanza de recuperación. Niños de 11 años que no pueden hacer una simple suma, no pueden construir una frase gramaticalmente correcta. Estas son las cosas que ustedes y yo esperaríamos que un niño de 8 años sea capaz de hacer. Cuando los niños tienen 13 o 14, tienden a abandonar la escuela. En la India, las escuelas públicas no sólo ofrecen educación gratuita, también ofrecen cuadernos, libros y comida gratis, a veces incluso becas en efectivo. Y, sin embargo, el 40% de los padres hoy en día están optando por sacar a sus hijos de las escuelas públicas y pagar de sus bolsillos para ponerlos en escuelas privadas. A modo de comparación, en un país mucho más rico, los EEUU, ese número es sólo el 10%. Esa es una gran prueba de que el sistema de educación pública de la India está fallando.
1:58 Dadas estas circunstancias, recibí una llamada en el verano de 2013, de una señora absolutamente brillante llamada Surina Rajan. Ella era, en ese momento, jefa del Departamento de Educación Escolar en un estado llamado Haryana en la India. Así que ella nos dijo: «Mira, yo he estado dirigiendo este departamento durante los últimos dos años. He intentado varias cosas y nada parece funcionar. ¿Podrías ayudarme?»
02:23 Vamos a describir un poco a Haryana primero. Haryana es un estado que cuenta con 30 millones de personas. Tiene 15,000 escuelas públicas y más de 2 millones de niños en dichas escuelas públicas. Así que, básicamente, con esa llamada telefónica, prometí ayudar a transformar a un estado y a un sistema que era tan grande como el Perú o Canadá. A medida que empecé este proyecto, era muy consciente de dos cosas. Uno, que nunca había hecho nada como esto antes. Y dos, muchos otros habían intentado, quizá sin demasiado éxito. A medida que mis colegas y yo analizábamos todo el país y buscábamos en todo el mundo, no pudimos encontrar otro ejemplo que pudiéramos recoger y replicar en Haryana. Sabíamos que teníamos que elaborar nuestro propio proyecto.
03:11 Pero de todos modos, nos metimos de lleno en el proyecto y salieron todo tipo de ideas. La gente dijo, «Vamos a cambiar la forma en que contratan a los maestros, vamos a contratar a nuevos directores y formarlos y enviarlos en viajes internacionales de aprendizaje, vamos a poner la tecnología dentro de las aulas.» Hacia el final de la primera semana, teníamos 50 ideas sobre la mesa, todas increíbles, todas parecían correctas. No había manera de que pudiéramos ser capaces de implementar 50 cosas.
03:38 Así que dije: «Espera, detente. Primero vamos a decidir qué es lo que estamos tratando de lograr.» Así que, tras un largo debate, Haryana se fijó un objetivo: Al 2020, queremos que el 80% de nuestros hijos estén nivelados en el conocimiento correspondiente de su grado. Ahora, los detalles de la meta no importan, lo que importa es lo específica que fue la meta. Porque realmente nos permitió tomar todas las ideas que estaban siendo arrojados a nosotros y decir cuáles poner en práctica. ¿Acaso esta idea apoya esta meta? Si es así, vamos a mantenerla. Pero si no lo hace o no estamos seguros, vamos a ponerla a un lado. Tan simple como suena, el tener un objetivo muy específico ha permitido que seamos realmente muy concentrados en nuestro viaje de transformación. Y mirando hacia atrás en los últimos dos años y medio, ha sido un enorme efecto positivo para nosotros.
04:30 Así que ya teníamos la meta y ahora teníamos que averiguar cuáles eran los problemas, lo que no funcionaba. Antes de ir a las escuelas, mucha gente nos dijo que la calidad de la educación era deficiente, ya sea porque los maestros eran perezosos, porque no entraban en las escuelas, o eran incapaces, que en realidad no sabían cómo enseñar. Pues bien, cuando fuimos a las escuelas, encontramos algo completamente diferente. La mayoría del tiempo, casi todos los profesores en realidad estaban dentro de las escuelas. Y cuando hablé con ellos, me di cuenta de que eran perfectamente capaces de dar clases elementales. Pero ellos no estaban enseñando. Fui a una escuela donde los maestros estaban supervisando la construcción de un aula y de un baño. Fui a otra escuela donde dos de los maestros habían ido a una sucursal bancaria cercana a depositar dinero de la beca en las cuentas de los niños. Al mediodía, la mayoría de los maestros estaban gastando todo su tiempo en conseguir que se prepare la comida del mediodía, supervisado y sirviéndoles a los estudiantes.
5:29 Así que les pregunté a los maestros, «¿Qué está pasando, ¿por qué no enseñan?» Y ellos respondieron: «Esto es lo que se espera de nosotros. Cuando un supervisor viene a visitarnos, estos son exactamente las cosas que revisa. ¿Se ha limpiado el inodoro, se ha servido la comida? Cuando mi director va a una reunión en la sede, estas son exactamente las cosas que se discuten».
05:51 ¿Lo ven? Lo que había sucedido era que, en las últimas dos décadas, la India había estado luchando contra el reto del acceso, tener suficientes escuelas, la matrícula, lograr que los niños asistan a las escuelas. Por lo que el gobierno puso en marcha toda una serie de programas para hacer frente a estos retos y los maestros se convirtieron en los ejecutores implícitos de estos programas. No explícitamente, pero implícitamente. Y ahora, lo que realmente se necesitaba no era capacitar más a los maestros o controlar su asistencia, sino decirles que lo más importante era que vayan a las aulas y enseñen. Tienen que ser monitoreados y medidos sobre la calidad de la enseñanza y no en todo tipo de otras cosas.
06:37 Así que, mientras que avanzábamos a través del sistema educativo, profundizamos cada vez más y encontramos algunas de esas causas fundamentales y determinantes, que fueron dando forma a cómo se comportaba la gente en el sistema. Y nos dimos cuenta de que si no cambiábamos esas cosas concretas, podíamos hacer una serie de otras cosas: podíamos capacitar, podíamos poner la tecnología en las escuelas; pero el sistema no iba a cambiar. Y hacer frente a estas cuestiones fundamentales no evidentes se convirtió en una parte clave del programa.
07:05 Por lo tanto, ya tenemos el objetivo y los problemas, y ahora se necesita averiguar cuáles son las soluciones. Obviamente no queríamos reinventar la rueda, por lo que dijimos: «Vamos a mirar alrededor y ver lo que podemos encontrar.» Y nos encontramos con estos hermosos, pequeños experimentos piloto en todo el país y en todo el mundo. Pequeñas cosas realizadas por las ONGs, por las fundaciones. Pero lo que también fue interesante fue que ninguno de ellos realmente escalaba. Todos ellos se limitaban a 50, 100 o 500 escuelas. Y aquí, buscábamos una solución de 15,000 escuelas.
07:40 Así que buscamos por qué, si estas cosas realmente funcionan, ¿por qué no escalan? Lo que sucede es que cuando una ONG típica entra, no solo trae su experiencia, sino también trae recursos adicionales. Podrían traer dinero, gente o tecnología. Y en las 50 o 100 escuelas que operan, esos recursos adicionales en realidad crean una diferencia. Pero, imaginemos que la cabeza de esta ONG va a la cabeza del Departamento de Educación de las Escuelas y dice: «Oye, ahora vamos a hacer esto para 15,000 escuelas.» ¿De dónde va a encontrar el dinero para escalar esta realidad para 15,000 escuelas? No tiene el dinero adicional, no tiene los recursos. Y por lo tanto, las innovaciones no escalan. Así que desde el principio del proyecto, lo que dije fue: «Todo lo que hagamos tiene que ser escalable, tiene que funcionar en todas las 15,000 escuelas.» Y, por lo tanto, tiene que funcionar dentro de los presupuestos existentes y los recursos del Estado. Mucho más fácil decirlo que hacerlo. (Risa)
08:47 Creo que este fue sin duda el momento en que mi equipo me odiaba. Pasamos largas horas en la oficina, en los cafés, a veces incluso en bares, rascándonos la cabeza y diciendo: «¿Dónde están las soluciones?, ¿cómo vamos a resolver este problema?»
09:03 Al final, creo que encontramos soluciones a muchos de los problemas. Voy a dar un ejemplo. En el contexto de un aprendizaje efectivo, una de las cosas que la gente habla es del aprendizaje práctico. Los niños no deben memorizar las cosas de los libros, deben hacer actividades y eso es una forma más eficaz de aprender. Lo que básicamente significa darle a los estudiantes cosas como cuentas, barras y ábacos. Pero no teníamos los presupuestos para darles eso a 15,000 escuelas, 2 millones de niños. Necesitábamos otra solución. No podíamos pensar en Nada. Un día, uno de nuestros miembros del equipo fue a una escuela y vio a un maestro recoger palos y piedras del jardín exterior y llevarlas al aula y a los estudiantes. Ese fue un gran momento ‘eureka’ para nosotros. Así que, ahora, después de cada concepto en los libros de texto en Haryana hay una pequeña caja con instrucciones para los maestros diciendo, «Para enseñar este concepto, esta es una actividad que se puede hacer. Y, por cierto, con el fin de hacer realidad esta actividad, esto es lo que se puede utilizar en su entorno inmediato, ya sea en el jardín exterior o el interior de la sala de clase, que se puede utilizar como ayuda para el aprendizaje de los niños». Y vemos a los maestros en todo Haryana usando muchas de estas cosas innovadoras con las que pueden enseñarles a los estudiantes. Así que, lo que hemos diseñado, fuimos capaces de ponerlo en práctica en todas las 15,000 escuelas desde el primer día.
10:31 Ahora, esto me lleva a mi último punto. ¿Cómo se implementa en 15,000 escuelas y 100,000 maestros? El departamento solía tener un proceso que es muy interesante. Me gusta llamarlo «La Cadena de la Esperanza». Escribirían una carta en la sede y la enviarían al siguiente nivel, que son las oficinas del distrito. Se esperaría que un oficial obtuviera la carta en cada una de estas oficinas de distrito, la abriría, leería y luego la remitiría al siguiente nivel, que es la sede de bloque. Y entonces es de esperar que en la oficina de bloques, otra persona recibiera la carta, la abriría, leería y la remitiría finalmente a los 15,000 directores. Y entonces es de esperar que los directores recibieran la carta, la entendieran y comenzaran a implementarla. Era un poco ridículo. Ahora, sabíamos que la tecnología era la solución, pero también sabíamos que la mayoría de estas escuelas no tienen una computadora o correo electrónico. Sin embargo, lo que los maestros tienen son teléfonos inteligentes. Están constantemente en SMS, en Facebook y en WhatsApp.
11:39 Entonces, lo que sucede ahora en Haryana es que todos los directores y maestros se dividen en cientos de grupos de WhatsApp y cuando algo necesita ser comunicado, se publica en todos grupos. WhatsApp comunica explosivamente. Se puede comprobar inmediatamente que lo ha recibido, que lo ha leído. Los profesores pueden hacer preguntas de aclaración de forma instantánea. Y lo que es interesante es que no sólo la sede responde estas preguntas. Otro maestro de una parte completamente diferente del Estado puede responder. Todos están actuando como grupo de compañeros de todo el mundo, y las cosas están funcionando. Hoy en día, cuando se va a una escuela en Haryana, las cosas se ven diferentes. Los maestros están de vuelta dentro de las aulas, están enseñando. A menudo con técnicas innovadoras. Cuando un supervisor viene a visitar el salón de clase, él o ella no sólo comprueban la construcción del baño, sino también la calidad de la enseñanza. Una vez por trimestre, todos los estudiantes de todo el estado son evaluados con respecto a su aprendizaje y las escuelas que obtienen buenos resultados son recompensadas. Y las escuelas que no lo están haciendo tan bien se ven obligadas a participar de conversaciones difíciles. Por supuesto, también reciben apoyo adicional para poder hacerlo mejor en el futuro. En el contexto de la educación, es muy difícil ver resultados rápidamente.
13:02 Cuando la gente habla de cambios sistémicos a gran escala, hablan de períodos de 7 años y 10 años. Pero no en Haryana. En el último año, se han realizado tres estudios independientes, todos midiendo el aprendizaje, que indica que algo fundamental, algo único, está sucediendo en Haryana. Los niveles de aprendizaje de los niños han dejado de disminuir, y han comenzado a subir. Haryana es uno de los pocos estados en el país que está mostrando una mejora, y ciertamente el que muestra la mayor tasa de mejora. Estos siguen siendo las primeras señales, hay un largo camino por recorrer, pero nos da mucha esperanza para el futuro. Hace poco fui a una escuela, y cuando me iba, me encontré con una señora, su nombre era Parvati, madre de un niño, y ella estaba sonriendo. Y yo dije: «¿Por qué sonríes?, ¿qué está pasando?» Y ella dijo: «No sé lo que está pasando, pero lo que sí sé es que mis hijos están aprendiendo, se divierten, y por el momento, dejaré mi búsqueda de una escuela privada para enviarlos.»
14:08 Así que regreso al punto de partida: ¿Pueden los sistemas de gobierno transformarse? Desde luego que sí. Creo que si se les da las herramientas adecuadas, pueden mover montañas.
14:18 Gracias.
Lampadia